Carné permite a migrantes trabajar en sector agrícola
Un decreto firmado este viernes por el Gobierno y coordinado con el sector privado establece el marco para regular la condición de los trabajadores migrantes que se dediquen exclusivamente a las actividades agropecuarias.
La medida abre la opción para que la mano de obra de otros países tramite un carné que los acredite como trabajadores agrícolas. En los dos primeros años será de renovación anual y, posteriormente, cada dos años.
El programa se dirige, especialmente, a las actividades agrícolas con estacionalidad, las cuales requieren aumentar la mano de obra en las épocas de recolección. Trabajadores permanentes de cultivos como piña, banano y ganadería generalmente están en otros regímenes, pues laboran durante todo el año.
Para obtener este documento, el interesado debe aportar su hoja de delincuencia, pagar $60 para la emisión por primera vez y $90 para la renovación y firmar una declaración jurada en la cual se compromete a respetar su decisión de trabajar en las fincas agropecuarias y no hacerlo en otras áreas, como la construcción.
Si ya está aquí, debe demostrar que permaneció hasta tres años hacia atrás.
El trámite que deben realizar estos trabajadores es personal y el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) abrirá oficinas regionales en todas las zonas del país para recibir las solicitudes.
Este plan fue definido en conjunto por el MAG y la Cámara Nacional de Agricultura y Agroindustria (CNAA) y posteriormente consensuado con el Ministerio de Trabajo y la Dirección General de Migración y Extranjería.
Así lo explicaron Martín Calderón, director ejecutivo de la Cámara de Agricultura y Agroindustria (CNAA), y la viceministra del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), Ana Cristina Quirós.
Quirós manifestó que es un logro muy relevante, porque es la primera vez que se abre la categoría especial para trabajadores migrantes agrícolas, lo cual costó muchísimo.
Migración es el ente encargado de dar las aprobación final a las solicitudes y aplicará sus requisitos, pues, por ejemplo, revisará el expediente internacional de cada caso.
El debate sobre la regularización de los trabajadores migrantes del agro se encendió cuando se aprobó la nueva Ley General de Migración, en el 2010, donde se crearon multas para los patronos que contrataban mano de obra ilegal.