Hawái construye un enorme telescopio sobre volcán sagrado
››Obras, que debían comenzar en 2015 y terminar en 2027, aún no arrancaron
MAUNA KEA, HAWÁI. AFP. En la ladera del Mauna Kea, un volcán inactivo que domina la isla de Hawái, cientos de manifestantes tratan de impedir la construcción del telescopio más grande del hemisferio norte.
El inicio de la construcción del Telescopio de Treinta Metros (TMT), que según los astrónomos tendrá una resolución doce veces mayor que la del Telescopio Espacial Hubble, se ha atrasado años por las protestas pacíficas, que han contado con el apoyo de celebridades como Dwayne Johnson, Jason Momoa y Bruno Mars.
Los manifestantes argumentan que este proyecto (valorado en $1.400 millones) de levantarse en tierras “sagradas”, dañaría el medio ambiente y atentaría contra la soberanía de las comunidades autóctonas.
Las obras, que debían comenzar en el 2015 y terminar en el 2027, aún no arrancaron.
“La construcción se ha atrasado durante años debido a esta situación. El costo también ha subido significativamente”, dijo a la AFP Christophe Dumas, astrónomo francés y jefe de operaciones de TMT, quien explicó que ya “el proceso para obtener el permiso de construcción había durado 10 años”.
Los manifestantes han dicho al grupo de científicos detrás del proyecto, que el TMT puede ser construido en un lugar menos polémico. Propusieron una montaña en las Islas Canarias, España, pero Dumas sostuvo que el Mauna Kea “sigue siendo el lugar ideal” en el hemisferio norte, debido a su altitud de 4.205 metros y al El proyecto de construcción del telescopio está valorado en $1.400 millones
porcentaje de noches despejadas “del entorno del 70%”.
El nuevo telescopio, según los científicos, permitiría a los astrónomos presenciar “la formación de galaxias en los límites del universo observable, cerca del principio de los tiempos”.
Estas condiciones justifican los otros 13 telescopios que ya se encuentran instalados en la ladera del volcán, desde donde se hacen nuevos descubrimientos cada año y se publican estudios científicos.
Y algunos consideran que otro más haría una gran diferencia.
“Hablé con los líderes de los grupos opuestos (al proyecto) y han dejado muy claro que no solo es demasiado grande, sino que son demasiados telescopios”, dijo Greg Chun, director de la administración del Mauna Kea en la Universidad de Hawái.
Los científicos comenzaron a acudir en masa a Mauna Kea después de que un tsunami, en 1960, devastara las comunidades que habitaban a lo largo de las faldas del volcán, y las autoridades locales, en un intento por reactivar la economía de la zona, comenzaron a atraer a los astrónomos.
“Desde el principio, el desarrollo de la astronomía suscitó preocupación, no es algo nue vo”, señaló Chun.
Pero muchos observadores dicen que el debate de Mauna Kea va más allá de un simple telescopio y refleja el resenti miento arraigado de algunos hawaianos nativos por los abu sos del pasado y el legado de colonialismo en las islas.
Jonathan Osorio, un ex perto en cultura hawaiana y opositor al telescopio, insistió en que tanto él como otros ma nifestantes no se oponen a la ciencia sino a la construcción en tierra sagrada.