‘Lloraba en la pista, no creía que estaba en la final’
Puriscaleña asegura que aunque tuvo una temporada brillante, siempre aspira a lo más alto
––¿Cómo analiza su quinto lugar en el Mundial de Catar? —La verdad, todo el Mundial estuvo muy duro. Al principio traté de enfocarme mucho en mi salida, no pensar tanto en los tiempos. Me enfoqué en cada carrera. Primero la eliminatoria y, luego, semifinales y finales. Al principio me sentí nerviosa, pero en la final estaba bien relajada. Solo quedó darle duro, porque la pista estaba rica, muy rápida para correr y yo tenía mucho ánimo.
––¿Cuál fue la clave para mantener el buen nivel mostrado en los Panamericanos y después superarlo en Catar? —No fue fácil. Traté de mantenerme entrenando fuerte, pero también el último mes estuvo un poco ajetreado porque estaba alistando mis cosas para el viaje (se va a vivir a los Estados Unidos) y otros asuntos, por lo que era muy cansado, pero siempre me enfoqué en las competencias. Los fogueos en Europa fueron importantes.
––Aunque dijo que no pensaba en tiempos, no pudo ocultar su gran emoción al mejorar su marca personal en las eliminatorias, con el 12:64. —No trataba de ver los tiempos. Le di mucho énfasis a correr duro, pero sí, fue una gran sorpresa el poder bajarlos en la eliminatoria y eso me dio confianza para el resto de la competencia.
––¿Cuáles fueron sus sensaciones al avanzar a la final? —Fue espectacular estar en un Mundial, es diferente. Después de la semifinal, en la pista de calentamiento estaba llorando porque no podía creer que estaba en la final. En un Mundial hay mucha presión, una gran exigencia, porque todas quieren una medalla, por lo que yo sabía que tenía que enfocarme en mi carril. Gracias a Dios pude dar lo máximo con al apoyo de mi familia, mi mamá y entrenadora y de todos los ticos.
––¿Cómo hizo para sobreponerse físicamente de una competencia a otra en tan corto tiempo?
—Después de la eliminatoria me dio dolor de cabeza por el calor, por lo que tuve que hidratarme. En la semifinal me hidraté de nuevo para prevenir alguna molestia, me puse hielo en los músculos y me masajearon. Aunque el estadio tenía la temperatura regulada, la pista de calentamiento estaba al aire libre y se sentía mucho calor.
––¿Es su mejor temporada? —Este año logré mis mejores tiempos, pero aún tengo mucho por mejorar. Debo seguir entrenando fuerte. Lo del Panamericano fue un logro que no puedo explicar, al igual que este quinto lugar. Son sensaciones que no se pueden describir. Sin duda este año ha sido muy exitoso, por lo que estoy agradecida con Dios.
––¿Qué sigue ahora?
—Está fue mi última competencia del año y ahora me voy de vacaciones. Tendré está semana que viene muy ajetreada por los compromisos y el asunto del viaje a Estados Unidos. Espero estar un mes con mi familia y empezar pretemporada para Tokio.
“Sin duda este año ha sido muy exitoso. Estoy muy agradecida con Dios”.