Ingresos del ICE suben por más consumo de luz y datos móviles
Entidad prevé ahorrar ¢7.685 millones al año con última movilidad voluntaria de 218 empleados
El balance financiero del Grupo ICE pareciera inclinarse hacia una mejoría que le permite un respiro, sin que implique aún estabilidad financiera dado su alto endeudamiento.
El conglomerado de empresas públicas registró, al tercer trimestre del 2019, un aumento en sus ingresos del 5,8% en relación con el mismo periodo del año anterior, al pasar de ¢1.036.100 millones a ¢1.096.441 millones; una diferencia de ¢60.341 millones, indican sus últimos estados financieros.
Los integrantes de este grupo empresarial son el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) y sus subsidiarias Radiográfica Costarricense S. A., Compañía Nacional de Fuerza y Luz S. A. (CNFL), Compañía Radiográfica Internacional Costarricense S.A. (Cricsa), Cable Visión de Costa Rica S. A. (CVCR) y Gestión de Cobro Grupo ICE S. A.
El negocio de electricidad aportó la mayor parte del dinero al cerrar su ingreso en ¢645.394 millones; un repunte de ¢39.042 millones (6,4% más) respecto a los ¢606.352 millones a setiembre del 2018.
Ese resultado refleja el aumento de 2,3% en la demanda de electricidad nacional a octubre del 2019 en relación con el año anterior, de acuerdo con estadísticas del Centro Nacional de Control de Energía (Cence).
Las ventas en telecomunicaciones, entre tanto, dejaron ¢451.047 millones de ingreso a setiembre anterior; una subida de ¢21.299 millones (4,9% adicional) desde los ¢429.748 millones que ese negocio aportó a setiembre del 2018.
Este último incremento descansa en el negocio de telefonía móvil, del cual el ICE, con su marca Kölbi, absorbió 53,6% del mercado en el 2018, seguido de la española Telefónica (Movistar) con 26,6% y la mexicana América Móvil (Claro) con 19,2%; indican datos de la Superintendencia de Telecomunicaciones (Sutel).
Esos porcentajes reflejan que Kölbi, al igual que Movistar, aumentaron su participación respecto al 2017 cuando tenían 51,8% y 26,3%, respectivamente. Claro, en cambio, varió de 21,3% a 19,2%.
Los ¢60.341 millones representan el salto más amplio en ingreso para el Grupo en los últimos años.
A setiembre del 2018, sus ingresos crecieron ¢31.000 millones y, un año antes, más bien cayeron ¢42.000 millones respecto al mismo periodo del 2016, revelan últimos estados financieros.
Las mejores cifras, a setiembre del 2019, resultan de un incremento de 5,44% en la demanda de electricidad del Instituto en generación (energía que vende a otros distribuidores) y un alza de 3,6% en el consumo eléctrico de sus propios abonados, precisó Hazel Cepeda Hodgson, gerenta del Grupo ICE.
Además, agregó Cepeda, en el negocio de Telecomunicaciones se presentó un mayor consumo de datos de clientes de telefonía móvil Kölbi.
A estos resultados se suma la reducción de planilla. Este lunes, el ICE anunció que proyecta ahorrar anualmente ¢7.685 millones con el último proceso de movilidad laboral voluntaria de finales del 2019, en el que se retiraron de la institución 218 trabajadores.
La salida de personal se inició el 16 de diciembre del 2019 y finalizará el 29 de febrero del 2020. Este es el octavo proceso voluntario que se realiza desde el 2012. En los siete previos, del 2012 al 2016, se retiraron 1.417 trabajadores.
“A LA FECHA, LAS ACCIONES ADOPTADAS —QUE SON PARTE DEL PROCESO DE TRANSFORMACIÓN INSTITUCIONAL— HAN IMPLICADO CAMBIOS POSITIVOS, PERO LA META CLARA SIGUE SIENDO MEJORAR LA EFICIENCIA OPERATIVA, EL INCREMENTO EN LOS INGRESOS CON SERVICIOS Y PRODUCTOS RENTABLES, Y EL MEJORAMIENTO DE LA ESTRUCTURA DE LA DEUDA”. Hazel Cepeda Gerenta del Grupo ICE
Falta camino. Sin embargo, la salud financiera del Grupo ICE todavía sigue en cuidados intensivos.
Los estados financieros al III trimestre del 2019 también evidencian que el Grupo tiene una deuda productiva (inversiones) por ¢2,9 billones por obligaciones con bancos, colocación de bonos de deuda y arrendamientos operativos, entre otros.
Cepeda reconoce que para disminuir de forma sustancial la distancia entre ese nivel de deuda y el capital propio invertido, es necesario generar un “excedente de operación superior y sostenido”.
Si bien es cierto que los resultados a setiembre del 2019 son satisfactorios, la funcionaria recalcó que no puede concluir que ya se hayan alcanzado los objetivos de estabilidad financiera.
“A la fecha, las acciones adoptadas –que son parte del proceso de transformación institucional– han implicado cambios positivos, pero la meta clara sigue siendo mejorar la eficiencia operativa, el incremento en los ingresos con servicios y productos rentables, y el mejoramiento de la estructura de la deuda”, explicó.
El mayor excedente, advierte la funcionaria, contribuye a bajar el endeudamiento, pero todavía se requieren mayores excedentes operativos y de forma sostenida.
“En electricidad, como es conocido, no se requieren inversiones sustanciales en los próximos años, y los esfuerzos estarán orientados a mejorar los indicadores de eficiencia operativa”, comentó.
En telecomunicaciones, con el nombramiento de un nuevo gerente, “se tiene como objetivo clave la valoración e impulso a una propuesta de servicios diferenciadores y disruptivos, con una mejora en los tiempos de respuesta y calidad de los servicios”.
Dicho cargo lo ocupa desde el 6 de enero, Mauricio Rojas Cartín, quien se desempeñó en ese mismo puesto en Correos de Costa Rica.
“El ICE debe seguir siendo líder en Costa Rica y hay que fortalecerlo, hay que ser más agresivos y mucho más eficientes en la gestión de servicio al cliente.
”Ahí puedo apoyar muchísimo porque la orientación al cliente ha sido en últimos años el desvelo de Correos de Costa Rica”, dijo Rojas.