Marcel tiene en la mira ser goleador con 20 anotaciones
Solo Róger Rojas, Erick Scott y Ariel Rodríguez lo han hecho desde 2010
Ponerse una meta de goleo siendo delantero parecería descabellado, mucho más cuando se piensa en 20 goles en un torneo cuya fase regular es de 22 fechas. Para sumar aún más factores en contra, en Costa Rica solo tres arietes llegaron a esa cifra en la última década.
Sin embargo, a Marcel Hernández no le importó nada de esto y aseguró que llegará a 20; de momento, cumple con creces y suma cinco en cuatro jornadas.
El atacante de Cartaginés señaló, el día de su renovación con los brumosos, entre broma y en serio, que buscaría ese número, a pesar de que ni en su mejor certamen hasta ahora lo consiguió (15 tantos en el Apertura 2018).
El cubano tiene una mentalidad distinta y en su mente todo es una realidad, su consigna es clara y por lo mismo vive un inicio voraz, con un doble ante Santos, una diana frente a Saprissa y dos más contra Grecia.
Incluso, Hernández carga con su equipo y es el referente en un club que suma siete goles en el Clausura 2020, cinco de ellos los anotó el isleño (71%). Solamente Cristopher Núñez y Ronaldo Araya concretaron para los centenarios cuando no lo hizo el ‘9’.
“Sí, veo y visualizo un campeonato en el que anote 20 goles, porque me veo peleando la final y, si me proyecto ahí, me veo anotando y ayudando al grupo con goles”, manifestó el atacante.
Lista pequeña. Si Marcel logra su objetivo, se colocará en una lista selecta de matadores, debido a que Róger Rojas, Erick Scott y Ariel Rodríguez son los únicos que llegaron o sobrepasaron los 20 dardos del 2010 a la fecha.
Rojas consiguió 20 con Alajuelense en el Clausura 2018, Scott llegó a 22 con Limón en el Verano 2017 y Rodríguez concretó 20 con Saprissa en el Invierno 2015.
Hernández asumió un papel distinto desde que amplió su ligamen con Cartaginés por tres años y medio más. Es normal verlo dando instrucciones en la cancha, regaña a sus compañeros, les da una voz de aliento y cuando más se necesita, aparece para ponerse al club a sus espaldas.
El ariete es de los capitanes del plantel y reconoce que debía tomar un rol diferente.
“Desde que llegué y, pasó el primer torneo, he sido enfático con el liderazgo y mi papel en el club.
”Creo que lo mental, algunas veces, nos pasa factura, por eso me gusta transmitir esto y me ha tocado. El grupo lo ha aceptado así, saben el rol que tengo dentro del equipo”, expresó.