Reformas electorales necesarias
Luego de las elecciones municipales del 2 de febrero, es trascendental no dejar enfriar muchos temas relevantes que, gracias a la discusión generada, surgen como reformas urgentes de promover para mejorar la calidad del proceso y luchar contra el abstencionismo.
Reelección. Es indispensable poner un límite a la cantidad de periodos para reelegirse en las alcaldías. Doce años de labores continuas es más que suficiente. El tope también debe fijarse a regidurías y concejalías. Además, debe legislarse para que quienes estando en el cargo y deseen reelegirse sean separados sin goce de salario, por lo menos dos meses antes del día de las elecciones. Con eso se disminuyen ventajas inconvenientes entre los aspirantes.
No necesariamente una mayor cantidad de partidos políticos garantiza su calidad ni la de nuestra democracia. Sin que sean barreras insalvables para los ciudadanos, debemos ser más exigentes con los requisitos para constituir facciones políticas. No parece razonable que un partido cantonal se inscriba con solo 500 firmas. Esa cantidad representa el 8 % de la población de Turrubares, pero no significa nada en San José.
En los últimos comicios, en el cantón central de San José, hubo 15 partidos inscritos, 7 de los cuales ni siquiera alcanzaron 1.500 votos. Debe existir un mecanismo objetivo y técnico para fijar el requisito de inscripción, el cual podría medirse de acuerdo con el tamaño de la población de cada comunidad.
Remuneración. Gracias al proceso electoral, se evidenciaron distorsiones odiosas que deben ser corregidas con la mayor brevedad posible. Tal vez, no se podrá cambiar el salario actual, pero debe reformarse para los nuevos funcionarios. La remuneración debe resultar de una medición objetiva y técnica, para ello se puede tomar en cuenta varios factores, como presupuesto municipal, perfil académico del titular y tamaño y población del territorio cantonal. Se asignan valores a cada factor y así se define un salario más proporcional.
Requisitos de inscripción. Mucho se habló de exigir requisitos de idoneidad y preparación académica para quienes deseen ser elegidos. No es tan sencillo y sería una barrera peligrosa para el sano ejercicio democrático. Sin embargo, estar al día con los pagos de las cuotas de la Caja Costarricense de Seguro Social y de los impuestos nacionales y municipales no atenta contra el derecho a ser elegido y sería un filtro apropiado para dar legitimidad a las candidaturas.
Estos temas se imponen y deberían resolverse este mismo año, antes de que las luchas electorales por las contiendas nacionales del 2022 los empañen.
Conviene resolver inquietudes surgidas de los comicios del 2 de febrero
Hay otras reformas necesarias para mejorar la gobernabilidad local y la democracia participativa que se deben impulsar, como que el titular de la alcaldía presida el concejo municipal, eliminar las regidurías suplentes y concederles, además de voz, el voto a los síndicos, lo cual requiere una reforma constitucional. Sobre esas ideas también estaremos trabajando.