Transporte público reporta 1.500 ceses laborales por crisis
La caída en la demanda del transporte público debido a las medidas sanitarias para frenar la propagación del nuevo coronavirus, golpea el empleo en esa actividad.
Un total de 1.500 choferes y personal administrativo fueron despedidos de las empresas concesionarias de rutas de autobuses, de acuerdo con la Cámara Nacional de Transportes (Canatrans).
La directora ejecutiva de la Cámara, Silvia Bolaños, advirtió de que los despidos podrían multiplicarse en los próximos días.
Antes de la crisis, el transporte público generaba 80.000 empleos directos.
Otras medidas. Además de los despidos, a otros 800 empleados de transportes se les suspendió temporalmente su contrato laboral, por lo que afrontan la emergencia sanitaria sin salario. En tanto, otros 1.500 trabajan con horario reducido, según el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS).
Esa entidad todavía tiene pendiente de resolver la solicitud para suspender los contratos de 1.200 choferes y personal de este sector, así como la reducción de jornadas para otros 2.100 trabajadores.
Los autobuseros demandan al Congreso no incluir el diésel dentro del proyecto de ley que permitirá aprovechar la reducción en los precios de los combustibles para financiar subsidios a los trabajadores afectados por la crisis.
El plan fue avalado en primer debate el pasado lunes con los votos afirmativos de 49 diputados y uno negativo.
Con esa iniciativa, los precios de los carburantes regresarán a los montos vigentes al 4 de marzo pasado. De esa manera, aunque los precios internacionales continúen cayendo, la tarifa que pagará el consumidor se mantendrá en un monto fijo.
Según las proyecciones de venta de la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope), con ese mecanismo se podrían recaudar unos ¢20.000 millones en mayo, los cuales se usarían para ayudas.
“La rebaja de los combustibles representaba un pequeño respiro para las finanzas de las empresas; no obstante, la iniciativa que se encuentra en discusión en el plenario legislativo no solo congelaría la disminución, sino que, por el contrario, provocaría un incremento en el precio final del combustible, siendo contraproducente tanto para empresarios como para los usuarios”, afirmó Bolaños.
En el caso del diésel, el precio por litro vigente es de ¢464. Empero, con la posible aprobación de la iniciativa, el monto subiría a ¢498, que es el precio fijado por la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep) al 4 de marzo.
Los diputados volverán a sesionar el próximo lunes para votar algunos proyectos que se discuten para mitigar el impacto económico de los hogares y empresas a raíz de la emergencia.
“
ESTo ES iNSoSTENibLE. (...) AUNQUE LAS EMPrESAS HAN ToMAdo ACCioNES PArA EViTAr PrESCiNdir dE SU PErSoNAL, ES UNA SiTUACiÓN QUE YA SE NoS SALiÓ dE LAS MANoS”. Silvia Bolaños directora ejecutiva de Canatrans
Transporte de estudiantes. La crisis también alcanza a los transportistas de estudiantes, que desde el 16 de marzo se quedaron sin traslados.
Según el Consejo de Transporte Público (CTP), 5.200 busetas de transporte de estudiantes están paralizadas por la suspensión de las clases presenciales, ordenada para evitar el contagio.
Para esos casos, el director del Consejo, Manuel Vega Villalobos, solicitó a los padres de familia “solidaridad” y llamó a todos aquellos que estén en capacidad, a reconocer parte del pago mensual a estos empresarios.
“Si, por mucho tiempo, el transportista ha llevado a sus hijos a la escuela o colegio, cumpliendo con los parámetros del CTP, porque tienen las pólizas y Riteve al día, y las unidades cumplen con las medidas de seguridd, este es el momento de ser solidarios con ellos. Si podemos, como padres de familia, reconocerles al menos una parte de estos contratos, hagámoslo; sepamos que ellos tienen choferes y personal que les colabora y dependen de un salario”, manifestó el director del CTP.