Operativo contra saqueo en Parque Nacional Corcovado deja 11 detenidos
Once personas ligadas a cacería, extracción de oro y tala ilegal en el Parque Nacional Corcovado fueron detenidas, en la última semana, por autoridades del Ministerio de Ambiente y Energía (Minae) y del Organismo de Investigación Judicial (OIJ).
La información fue confirmada por Carlos Manuel Rodríguez, jerarca del Minae.
Durante el operativo, las autoridades incluso cerraron dos aserraderos clandestinos con gran cantidad de madera y equipos como un aserradero portátil, una sierra de mesa, una machimbradora y una cepilladora de mesa.
Los delitos fueron cometidos tanto en la Reserva Forestal Golfo Dulce como en el parque nacional, localizado en la península de Osa.
Operación. Estas bandas, precisaron las autoridades, tenían montada una operación constante de extracción de madera procesada por más de 7.000 pulgadas de diferentes especies de árboles.
Los grupos vendían la madera de forma ilegal en la Palma de Puerto Jiménez, adonde llevaban especies como cedro, cristóbal, fruta dorada y manguille.
Por adquisición ilegal de esta madera, se detuvo a tres hombres de apellidos Sánchez González, Rodríguez Gutiérrez y Valverde Granados.
En cuanto al delito de orería ilegal, se detuvo a cinco personas de apellidos Lobo García, Cerdas Solórzano, Vásquez Cedeño, Mora Vargas y Navarrete Rojas.
Por cacería ilegal y tenencia y portación ilegal de armas, se detuvo a dos individuos, ambos de apellidos Vargas Delgado (en apariencia, familiares), uno de los cuales tenía orden captura.
También se capturó a un sujeto de apellidos Arguijo Arroyo, por invasión a área de protección con naciente y por cambio de uso de suelo en patrimonio natural del Estado.
Terrenos invadidos. Como parte del operativo, los oficiales también detectaron terrenos invadidos que son propiedad del Estado o que se ubican en diversas zonas del Parque Nacional Corcovado.
Ante ello, y en conjunto con el Ministerio Público, se levantaron actas de notificación para el desalojo.
Se localizaron, además, varias estructuras de alojamiento conocidas como “champas”, en donde oreros o cazadores suelen pasar la noche, y se identificaron áreas donde el cauce del río fue alterado con la finalidad de extraer oro.