Cámara de la Construcción recomienda a diputados la aprobación del proyecto
Ante la solicitud de un criterio, requerido por los diputados de la Comisión de Infraestructura, la Cámara Costarricense de la Construcción (CCC) se pronunció a favor del tren eléctrico metropolitano.
Los empresarios del sector recomendaron a los diputados aprobar el préstamo por $550 millones, proveniente del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), necesario para financiar parte de la construcción del sistema de transporte público sostenible.
De acuerdo con la organización, el tren eléctrico permitirá reactivar la economía a mediano o largo plazo, también mejorará la calidad de vida de los habitantes al acortarse los tiempos de viaje, así como reducir las emisiones de gases contaminantes.
En su oficio, la Cámara resaltó las condiciones del empréstito. Además señaló que, a diferencia de otros proyectos de obra pública desarrollados en el país, en este caso se cumplieron todos los estudios de preinversión.
Ese sector ha reclamado, en varias ocasiones, que la ausencia de ese tipo de investigaciones retrasan y encarecen las obras de infraestructura.
También se pronunció afirmativamente ante la opinión pública la Cámara de Consultores en Arquitectura e Ingeniería, en el sentido de que el proyecto se sustenta con investigaciones técnicas.
Política. La discusión legislativa sobre el futuro del tren eléctrico dejó de lado la aprobación del préstamo y se ha centrado en los aportes estatales, que rondarían entre los $50 millones y $150 millones anuales, según el modelo de subsidio y la demanda del sistema de pasajeros.
Algunos diputados se han pronunciado en contra del proyecto por el estado actual de las finanzas públicas.
Al respecto, el presidente de la Cámara, Esteban Acón, expresó a La Nación que esos aportes estatales deben verse como una inversión por los beneficios que generarán al tener un sistema de transporte público sostenible.
“Este tipo de proyectos no se deben politizar, se tienen que analizar desde un punto de vista meramente técnico. Nadie se cuestiona cuánto se invierte en mantenimiento de carreteras y son montos muy significativos”, señaló Acón.
Entretanto, la Cámara de Consultores señaló que todavía se puede rebajar el costo de esos aportes, en las siguientes etapas del proyecto.
“El diseño de la etapa de licitación es clave para promover el menor costo, no solo de construcción y equipamiento, sino de operación, puesto que, como es la experiencia de todos los países con sistemas de transporte muy maduros, no es posible sufragar costos solo con lo pagado por el pasaje, mucho menos de manera que la tarifa resulte socialmente aceptable”, dijo la directora ejecutiva, Marisol Castro.
Sugerencias. Los constructores hicieron otras sugerencias para que el proyecto logre sus objetivos.
Entre ellas resaltan que, en la licitación pública, el Gobierno no asuma todo el riesgo de la demanda de pasajeros, con el objetivo de que la empresa concesionaria también busque incentivar el uso del transporte público.
También piden una fuerte participación de empresas en la licitación pública para que el país elija la mejor opción en términos operativos y financieros, así como la creación de un grupo técnico “que trascienda los cambios de administración y se garantice la continuidad” en el próximo gobierno.