Robot de la NASA buscará microbios en la superficie de Marte
››Vehículo intentará hallar evidencias de hace 3.500 millones de años
PASADENA, CALIFORNIA. AFP. Estados Unidos lanzará a Marte, el 30 de julio, su vehículo más sofisticado, un gran robot explorador de seis ruedas bautizado Perseverance, para intentar encontrar evidencias de que, hace 3.500 millones de años, auténticos microbios poblaban sus ríos.
El viaje interplanetario durará más de seis meses y, si el robot aterriza ileso, comenzará una exploración científica de varios años para recolectar y acondicionar decenas de muestras de rocas que serán recuperadas por un futuro aparato y traídas a la Tierra en el 2031.
Perseverance tomará el relevo de los cuatro vehículos, todos estadounidenses, que desde fines de la década de 1990, con la ayuda de satélites y robots fijos, transformaron nuestro conocimiento de Marte al demostrar que no siempre había sido seco y frío como ahora.
En la construcción del aparato participó el ingeniero Éric Aguilar, de 43 años, de ascendencia costarricense y quien labora en el Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL) de la NASA, ubicado en Pasadena, California.
El Planeta Rojo una vez tuvo los ingredientes de la vida: agua, compuestos orgánicos y un clima favorable.
En las muestras que recabará Perseverance, los científicos esperan encontrar fósiles de bacterias o de otros microbios y confirmar que la vida existió en aquel cuerpo celeste.
La Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) ha estado teletrabajando durante meses debido a la pandemia de covid-19, pero el calendario no ha cambiado para esta misión, en la que se han invertido $2.700 millones.
La Tierra y Marte están en el mismo lado del Sol cada 26 meses, una ventana que no están dispuestos a perder.
Solo los estadounidenses han logrado posar sobre Marte robots intactos; concretamente, cuatro aterrizadores (fijos) y cuatro vehículos exploradores: Pathfinder, Spirit, Opportunity y Curiosity, el único que sigue activo.
En los últimos 20 años, se confirmó que el planeta tuvo océanos, ríos y lagos.
Pero fue Curiosity el que constató la presencia de moléculas orgánicas complejas, aunque los instrumentos con los que cuenta este vehículo no pueden determinar si su origen fue biológico.
Ajustes en la búsqueda.
La NASA decidió entonces proceder por etapas: gracias al estudio de los suelos, el análisis químico y molecular de las rocas y las múltiples observaciones satelitales, los geólogos y los astrobiólogos, gradualmente, han comprendido dónde fluyó el agua y qué zonas podrían haber sido propicias para la vida.
“Entender dónde pudo haber sido habitable Marte en el pasado, y qué huellas de vida estamos buscando, fueron pasos necesarios para enviar una misión, muy cara, a este lugar cuidadosamente elegido para recolectar muestras”, explicó Hubbard. Perseverance aterrizaría el 18 de febrero del 2021 en el cráter de Jezero, donde corrió un río hace entre 3.000 y 4.000 millones de años, depositando lodo, arenas y sedimentos “en uno de los deltas mejor conservados de la superficie de Marte”, dijo Katie Stack, del equipo científico.