La Nacion (Costa Rica)

Marcel Hernández se libra de ir a juicio

Textos de Whatsapp fueron clave para descartar violación, resalta su abogado

- Cristian Brenes cristian.brenes@nacion.com Final del entrenamie­nto.

Apenas si podía articular palabras en medio de su emoción, la voz se le quebraba por lapsos y, luego de cada frase, reiteraba: “Estoy como loco, no sé qué decir”.

Marcel Hernández vivió con euforia su sobreseimi­ento definitivo, lo que implica que, de momento, no irá a juicio por el caso en el que figuraba como imputado por cuatro delitos de violación en perjuicio de una menor de edad.

El delantero atendió unos minutos a La Nación y señaló que su prioridad era comunicarl­e la noticia a su familia en Cuba y compartir este momento con sus seres queridos, quienes han sufrido y lo han apoyado a la distancia.

“Luego hablamos a profundida­d, porque la verdad es que no tengo ni palabras. Las preguntas que me vas a hacer no las puedo ni responder, porque no sé ni qué decir, no tengo ni palabras para describir cómo me siento (...).

”Estoy como loco, solo quiero hablar con mi familia para darles la noticia. Allá (Cuba) no hay las mismas facilidade­s de Internet, así que nada más estoy pendiente de hablar con mi familia. Solo tengo cabeza para eso”, dijo el cubano.

El abogado del atacante, Raymundo Pérez Castillo, fue quien le dio a conocer el fallo al brumoso. El futbolista acababa de terminar de entrenar y no se pudo contener al escuchar las palabras de su defensor.

“Cuando me lo comunicaro­n, estaba en el estadio (Fello Meza), acababa de entrenar. Lo primero que hice fue salir corriendo. Esto era lo que más esperaba. De lo que viene, no sé nada (...). Ahora mismo solo estoy pensando en mi mamá y en hablar con ella. Estoy esperando que se conecte para hablar con ella y contarle todo”, añadió.

Desde el momento en que el caso salió a la luz, el isleño ha defendido su inocencia y dijo confiar en que saldría bien librado. Luego del trabajo de sus representa­ntes legales y de las pruebas aportadas durante el proceso, el blanquiazu­l quedó libre de culpa; no obstante, la resolución no se encuentra firme y puede ser apelada.

“Llegará el momento en el que hable del caso y de los detalles, no hay que apurarse. Ahorita no puedo decir ni cómo me siento, estoy como loco”, finalizó.

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