‘sele’ de baloncesto halla en Nosara a su técnico
Michael Bradley, exjugador de la NBA, vive en esa comunidad costera de Guanacaste ›Exjugador dirigirá Sub-24 con 10 jóvenes ticos que están en ligas de EE. UU.
Desde tiempo atrás, Michael Bradley residía en playa Nosara, Guanacaste. Después de una carrera prolongada en la NBA, el exjugador se asentó en el país, una oportunidad que la Federación de Baloncesto no dejó pasar.
La Fecoba plasmó un proyecto para convencer a Bradley de mantenerse en Costa Rica durante ocho años y así liderar la Selección Sub-24, compuesta por una camada muy prometedora, pues más de 10 ticos participan en ligas colegiales o universitarias de EE. UU., en cuenta la principal carta, Ian Martínez, reclutado por la Universidad de Utah, en la NCAA.
El objetivo es que Bradley contribuya en el crecimiento de estos jóvenes, se convierta en el enlace con sus entrenadores en Estados Unidos y arme un equipo que le permita a Costa Rica clasificar a los Juegos Olímpicos del 2028, cuando estos juveniles crezcan y tengan entre los 29 y los 32 años.
La idea convenció el exjugador y coach, quien después de su retiro del baloncesto profesional dirigió al Summit Country Day de Cincinnati y consiguió ganar un campeonato estatal en el banquillo.
Reto. Bradley, exjugador de los Toronto Raptors, Atlanta Hawks, Orlando Magic y Sacramento Kings de la NBA, aceptó el desafío a partir de un buen número de circunstancias que favorecieron su llegada:
hh1. Le gusta mucho vivir en Costa Rica, al punto de que reside en Nosara.
hh2. Se encontró con una buena generación de jóvenes.
hh3. Quería volver a dirigir un equipo juvenil, pues le gusta la formación.
El delegado internacional de la Federación de Baloncesto, Víctor Madrigal, reconoce que habría sido imposible ofrecerle un salario alto que se compare con lo que ganan los entrenadores en Estados Unidos.
“Él decidió venir a vivir acá y siente un amor por el país desde hace muchos años. Él realmente no necesita trabajar, vive en Nosara porque le gusta. Él quería volver a trabajar con jóvenes y contribuir con el desarrollo”, explicó.
El primer contacto de Bradley con el baloncesto tico se produjo hace algún tiempo, cuando se comunicó con la Fecoba para explorar qué posibilidades existían de incursionar en el deporte de Costa Rica.
Fue allí cuando decidieron desarrollar un proyecto serio y ponerlo en papel. La Selección Sub-24 se presentaba como una alternativa real, que además calzaba con los objetivos de Bradley de dirigir a jóvenes.
Luego, empezaron el proceso de scouting para identificar a los jugadores que entran dentro de ese rango de edad.
La idea es elaborar dos campamentos al año en Texas, en donde se puedan juntar todos los juveniles que militan en Estados Unidos.
Adicionalmente, Bradley viajará a la Gran Área Metropolitana para hacer visorías y observar de cerca a los mejores prospectos de la liga de Primera División.
Madrigal reconoce que la belleza natural del país influye sustancialmente en la posibilidad de traer personal capacitado de Estados Unidos, que esté dispuesto a bajar sus tarifas normales con tal de residir en Costa Rica.
“Él no tiene un objetivo financiero, sino filantrópico. Le vendimos la idea de que tenemos más 10 de jugadores fuera del país y él podría ser una excelente canal”, agregó Madrigal.
“ÉL DECIDIÓ VENIR A VIVIR ACÁ Y SIENTE UN AMOR POR EL PAÍS DESDE HACE MUCHOS AÑOS. ÉL REALMENTE NO NECESITA TRABAJAR, VIVE EN NOSARA PORQUE LE GUSTA. ÉL QUERÍA VOLVER A TRABAJAR CON JÓVENES Y CONTRIBUIR CON EL DESARROLLO”. Víctor Madrigal Federación de Baloncesto