Ciudadanos menospreciados
SOLO SECTORES EN LAS MESAS DE DIÁLOGO
Siempre nos hemos ufanado de ser el país más democrático de la región, y nos hemos comido el cuento. Según los entendidos en la materia, democracia, en términos llanos y entendibles, es el gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo.
Pero en estos momentos de crisis generada por la pandemia, por la naturaleza y por el cúmulo de decisiones institucionales equivocadas, responsabilidad compartida por los tres poderes de la República, es el pueblo el único que no tiene representación genuina en los diálogos que pretenden sacarnos del atolladero.
Se sientan a la mesa de la tertulia delegados de los industriales y empresarios, de los trabajadores, pero solo de los servidores públicos y de la clase política. Esta última, la más responsable del entuerto que padecemos.
Pero los delegados de esa mayoría silenciosa y sumisa que es la que más directamente sufre la emergencia nacional no están ahí.
Me pregunto cuántos sindicatos hay en Costa Rica de trabajadores particulares y cuántas convenciones colectivas de trabajo han firmado los voceros de los sindicatos que trabajan para patronos particulares y ajenos al Estado.
Esas mayorías no tienen voceros ni representantes en los diálogos, que parecen establecidos para afianzar y perpetuar el statu quo.
Camilo Cifuentes Correa san José