Una receta de más de 40 años aún cautiva a los alajuelenses
Corresponsal de GN
El restaurante Hamburgesas Don Hernán era un sitio de encuentro obligado en Alajuela en los años 80 y 90.
Lo abrieron en 1979, luego de que don Hernán Madriz viajara a Estados Unidos y probara las hamburguesas. En aquel momento pensó: “Esto lo puedo hacer yo, estas tortas las podemos hacer y con un sabor más rico y casero”, cuenta su familia.
Así, junto con su esposa, María Cristina Sánchez Aguilar, arrancó el negocio que en poco tiempo se convirtió en uno de los lugares favoritos de los alajuelenses, en el centro de la ciudad.
Al llegar el nuevo milenio, don Hernán no trabajó más, aunque luego abrió locales pequeños que no duraron mucho. Sin embargo, el año pasado, su hijo, del mismo nombre, buscó la oportunidad de revivir Hamburguesas Don Hernán y, según dice, ha sido tan buena la acogida que no han dejado de crecer.
Curiosamente, las complicaciones de la pandemia fueron clave para el arranque de este proyecto y lo que motivó a sacar esta receta de la gaveta. Así lo confirmó José Alberto Madriz, nieto del creador, quien para julio del 2020, salió de estudiar sin opciones laborales por la crisis. A su papá le habían reducido la jornada y luego lo despidieron.
Fue cuando, en medio de las dificultades, vieron la oportunidad de hacer un nuevo intento. Comenzó con la imagen de una hamburguesa en una red social con la frase “Pronto de regreso” .
“La gente se volvió loca y empezaron a pedir y pedir, tuvimos que ver cómo hacernos de equipo, porque lo que se veía venir era grande, la respuesta de la gente fue inmediata”, relató José Alberto.
Desde aquel momento y hasta la fecha no dejaron de vender, pero solo para llevar o exprés.
“Aquí, el que se sabe la receta soy yo, y gracias a que papá siempre usó productos de calidad y naturales... cebolla, chile, ajo. En cuanto a lo que son mayonesas, mostaza y otras, pues eso lo hacíamos antes, pero hemos buscado el producto que más se acerque en sabor y calidad”, narró Hernán hijo.
Aparte de las gustadas hamburguesas, ampliaron el menú con sándwiches, perros calientes, batidos, helado de crema, rompope, prestiños y hasta higos en almíbar.
“Yo soy la encargada de salir al portón a entregar los pedidos, y uno ve la reacción de la gente, escucha a la gente que está esperando decir cosas como “huele igual”, “uy, sí ese olor”. Otros nos dicen que es la misma sensación de cuando comían en el centro (de Alajuela)”, contó María Auxiliadora Camacho, esposa de Hernán.