Abogado da detalles sobre remate del Fello
››Presidente del Cartaginés afirmó estar trabajando para resolver situación apremiante
Más allá de que el Cartaginés ya se vio en peligro de perder el Estadio José Rafael Fello Meza tiempo atrás, nunca antes estuvo tan cerca de que esto se diera. Incumplimientos en el fideicomiso que estableció el club en el 2017 con STCR Costa Rica Trust and Escrow Company Limited Sociedad Anónima llevaron a que se hiciera efectiva la fecha de remate (8 de setiembre del 2021).
La deuda con este acreedor asciende a $2.574.686, con intereses al día, y ayer se dio a conocer que el fiduciario (quien prestó el dinero en el 2017) optó por ejecutar sus derechos ante faltas al contrato firmado.
Sin embargo, muchas dudas surgen sobre el tema: ¿Qué implica el no cumplir con un fideicomiso? ¿Se puede llegar a un acuerdo y frenar todo? ¿Por qué se llegó a este punto? ¿Qué deben hacer quienes están interesados en dejarse el Fello Meza?
Gerardo Chaves, abogado especialista en procesos de ejecuciones, conversó con La Nación y evacuó las dudas.
“A nivel privado, la posibilidad de ejecutar es inmensamente más rápido que si se diera con otra figura como la hipoteca. En este caso específico, el fideicomiso se inscribe, pero en realidad el fideicomiso es un contrato que está definido con reglas entre las partes. Desde el momento en que se hace el fideicomiso, la finca (Estadio Fello Meza) deja de estar a nombre del Cartaginés y pasa al fiduciario, que es la persona que pone el dinero que requiere el propietario registral en su momento y así queda todo debidamente inscrito”, explicó Chaves.
El experto detalló que, con esta figura, de previo se establecen plazos, montos, intereses y formas de resolver en caso de que se incumpla con lo que se debe a nivel económico. Todas las partes conocen las reglas de antemano y también lo que ocurre con la propiedad que se puso como garantía.
Es decir, a diferencia de otros procesos, en el fideicomiso no se necesita que un juez establezca hora y fecha para hacer el remate, sino que esto se definió en el documento rubricado en el 2017.
“Dentro del fideicomiso viene la forma en la que se va a ejecutar y acá no hay intervención de jueces, sino de las personas que en su momento quedaron como garantes. Esto es una forma muy rápida, porque el fideicomiso permite que, ante un incumplimiento de las reglas establecidas, se llegue al remate sin estar en los problemas que se pueden dar, como anulaciones o solicitudes de suspensiones, incidentes de nulidad de aprobación de remate y demás. Nada de esto se da”, recalcó el especialista.
Al respecto, Leonardo Vargas, presidente de los blanquiazules dijo: “Tenemos claro que el Fello Meza es la casa de todos nosotros, los brumosos de corazón, y por ello, estamos trabajando en resolver el tema lo más pronto posible”.
Se desconoce cuál es la magnitud de los incumplimientos del Cartaginés con el fiduciario y si podría fácilmente enmendarlos antes del 8 de setiembre.
Rival. Si bien el tiempo juega en contra del club para detener el remate, aún hay posibilidades de frenar el proceso y evitar que se pierda el reducto. Así lo recalcó Chaves.
¿Cartaginés puede frenar el remate? “Es un tema meramente económico y hay que analizar cuál fue la motivación del fiduciario para poner el estadio en subasta. Sin embargo, sí hay posibilidades de frenarlo y hasta se puede hacer un minuto antes de la subasta, pero debe haber un acercamiento y un entendimiento muy fuerte de la dirigencia de Cartaginés, para intentar persuadir al fiduciario y lograr una suspensión”, dijo el jurista.
Además, agregó: “Puede hasta pasar que se den entregas de otras garantías, pero el remate se puede suspender en cualquier momento. La gran ventaja que tiene el fiduciario es que, en caso de cualquier otro incumplimiento, vuelve a ejecutar el remate. Si se da algún arreglo provisional, se informa que se suspende y listo. Todo dependerá del fiduciario, pero presumo que se han dado varios incumplimientos. Si la relación no está muy desgastada, es factible que lleguen a algún acuerdo”.
Otra de las grandes dudas sobre el tema es: ¿cuál es el paso a paso del remate y quiénes pueden optar por dejarse el estadio?
“En el procedimiento de subasta, se hace una lectura del aviso de remate, se indica en los medios en los que se realizó el aviso y se leen las características de la finca y el monto por el cual el fideicomiso tiene una base. Ahí pueden participar aquellas personas que presenten un cheque de gerencia de un banco que respalde no menos del 50% de la deuda. De ser así, es posible que una persona se lo adjudique y le darán un plazo de 30 días para que realice la cancelación del otro 50%”, arguyó.
Eventualmente, se puede dar que el inmueble se subaste por un monto mayor, si es que hay varios postores.
El abogado finalizó diciendo que quien cumpla y cancele todo dentro de los plazos que se fijaron, se adjudicará el estadio y, por ende, se realizará la escritura con todos los requerimientos de la ley.