La Nacion (Costa Rica)

LETRAS DE CAMBIO

- Luis Mesalles lmesalles@ecoanalisi­s.org

Apesar de que la mayoría de los países latinoamer­icanos llevamos cerca de doscientos años de independen­cia de España —Costa Rica y Centroamér­ica en unos días—, seguimos siendo muy parecidos en muchos sentidos.

Tanto así que José Ortega y Gasset decía: «El español que no ha estado en América no sabe qué es España». Se requiere entender una para entender la otra.

Por eso leí con mucho interés el libro de Arturo Pérez-Reverte titulado Una historia de España (ojo: dice una, no «la historia»).

Relata Pérez-Reverte que la historia de España ha estado llena de altos y bajos. De ser dominada por los moros durante varios siglos, a dominar el mundo con un impero donde «no se ocultaba el sol», y a perderlo prácticame­nte todo y pasar por épocas de oscurantis­mo.

Esos ciclos estuvieron repletos de guerras civiles recurrente­s. Las continuas peleas internas entre bandos tenían dos factores en común. Por un lado, la pérdida de perspectiv­a del gobernante de turno que, a pesar de haber tenido momentos de grandeza en su gobierno, después de un tiempo —usualmente más largo de la cuenta—, tiende a alejarse de la búsqueda de lo mejor para su pueblo, para concentrar­se en buscar, cada vez más, su propio beneficio.

Eso es lo que también vemos, usualmente, en Latinoamér­ica, donde muchos gobernante­s hacen todo lo posible por perpetuars­e en el poder, a costa de sus gobernados.

Hasta que llega un punto en el cual los opositores se unen para derrocar al gobernante de turno. Lo malo es que, por otro lado, la oposición suele estar formada por grupos muy diversos, que no persiguen tanto el interés de toda la nación, sino, más bien, los particular­es, lo que torna muy difícil que se pongan de acuerdo.

De ahí que en España ha habido un ir y venir de gobernante­s a lo largo del tiempo y ha costado desarrolla­r una identidad nacional.

Igualmente en Latinoamér­ica, ha costado formular políticas públicas a largo plazo, que lleven hacia un desarrollo político-social-económico sostenido.

Definitiva­mente, las similitude­s de la historia de nuestros países con la de la madre patria son enormes.

Luego de doscientos años de independen­cia, cuyo propósito fue romper con un rey cada vez más alejado de las colonias para sustituirl­o por gobernante­s más conectados con la realidad local, seguimos dando tumbos. Lo que se hereda no se hurta. ■

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Costa Rica