Cámaras captaron el ingreso ilegal de turistas al Turrialba antes de erupción
››Columna eruptiva alcanzó los 1.000 metros sobre cima del cráter
Las cámaras de monitoreo instaladas en los alrededores del Parque Nacional Volcán Turrialba permitieron corroborar que dos personas ingresaron ilegalmente al área protegida, este lunes alrededor de las 6 p. m., tres horas antes de que una erupción alcanzara los 1.000 metros sobre la cima del cráter.
Reina Sánchez, administradora del área protegida, confirmó que los sujetos entraron por el área de los miradores, pero luego no se pudo verificar si salieron por la misma área y sin sufrir daños.
La funcionaria denunció que estas actividades las organizan personas que realizan caminatas hasta la cima en horas de la madrugada para observar el amanecer y que, más recientemente, lo hacen en la tarde para ver la puesta del sol y agregó que estos turistas “suelen ingresar de manera ilegal por los sectores de La Picada, Los Quemados, La Silvia y Los Bajos.
”Estos hechos se dan desde el 2017 y representan no solo una irresponsabilidad a nivel personal y social, sino de impacto ambiental. Lastimosamente, hemos encontrado flora cortada y desechos sólidos, así como rastros de daños ocasionados a los animales, que se han visto obligados a desplazarse, delimitando los estudios que realizamos”, explicó.
La Comisión Nacional de Emergencias (CNE) reiteró los riesgos de ingresar ilegalmente al área protegida y recomienda a los futuros visitantes seguir las instrucciones de los guardaparques y hacer uso de los búnkeres instalados en las áreas de acceso público en caso de una erupción.
El parque nacional es un destino popular para campistas que suelen ingresar irregularmente, en la tarde, cuando el personal ya se fue, y proceden a salir temprano en la mañana antes de que regrese, agregó Javier Pacheco, investigador de vulcanología del Ovsicori.
Según detalló, los alrededores del cráter se han convertido en un punto atractivo para tomar fotografías. Pero en caso de erupción, se corre el riesgo de ser impactado por una roca incandescente a gran velocidad o de ser asfixiado por alguno de los gases que arroja el volcán.
El Turrialba es uno de los cinco volcanes más activos del país y esta erupción es de las más altas y explosivas que se han registrado en los últimos años. El primer evento del lunes se dio a las 9:27 p. m., hubo otro más fuerte a las 9:32 p. m, de acuerdo con lo que reportó el Observatorio Vulcanológico y Sismológico de Costa Rica (Ovsicori).
La pluma alcanzó los 1.000 metros de altura sobre el cráter y superó los 4.000 metros sobre el nivel del mar. Debido a los vientos acelerados que soplan en el país, estos materiales fueron dispersados hacia el oeste del cráter, principalmente hacia el área metropolitana.
Hubo reportes de ceniza y olor a azufre en Coronado, Moravia, Sabanilla, Moravia, San Pedro, San José centro, Pavas, Escazú, Santa Ana, Alajuela, Guácima y Belén. Se recomienda que los vecinos de las zonas adyacentes al volcán permanezcan alertas, puesto que es sumamente activo y podría volver a erupcionar.
Geoffroy Avard, coordinador de Vulcanología del Ovsicori, quien realiza un sondeo del área, llegó a reportar ceniza de hasta 15 cm de espesor y piedras con un tamaño de 10 a 15 cm en las cercanías del cono.
El volcán hizo una erupción freática, que ocurre cuando el magma calienta el agua subterránea, la cual se evapora rápidamente y provoca una explosión de vapor, cenizas y piedras. Personal del Ovsicori y del Parque Nacional Volcán Turrialba permanecen monitoreando la zona, mientras que el parque permanecerá cerrado hasta nuevo aviso.
Pese a que la ceniza llegó hasta Alajuela, el aeropuerto internacional Juan Santamaría confirmó que las operaciones no se vieron afectadas.
Muy activo. El ingreso de turistas al parque estuvo suspendido 17 días, desde el 29 de diciembre y hasta el pasado 14 de enero por varias exhalaciones que hizo el coloso en los últimos días del 2021. Estas nuevas erupciones de antenoche ocurrieron apenas al tercer día de su reapertura y demuestran que se trata de un volcán muy activo y que amerita monitoreo constante.
El 23 de noviembre también se pausó el ingreso de visitantes por la actividad del cráter.
El director del Sistema Nacional de Áreas de Conservación, Rafael Gutiérrez, afirmó que el acceso por el nuevo sector se hizo mediante un convenio, de modo que en el punto de partida, los guías reciben a los turistas para la caminata por la que la institución cobra ¢1.000 a residentes y $12 a los turistas. Por su parte, el equipo de guías cobra ¢6.000.