Méndez sobre sus últimos meses en el MOPT: ‘Credibilidad institucional es cero’
›Afirma que ha soportado ‘ofensas’ por ‘sentido de responsabilidad’
A pocos meses de terminar su gestión, el ministro de Obras Públicas y Transportes (MOPT), Rodolfo Méndez, admite que nunca imaginó que el sprint final resultara tan empinado.
El jerarca espera reunirse en las próximas semanas con los equipos de infraestructura de los candidatos José María Figueres y Rodrigo Chaves, quienes avanzaron a segunda ronda, con el fin de iniciar un proceso de transición que incluya la larga lista de pendientes que los mantienen ocupados y en medio de una crisis institucional.
“Hubiera imaginado que el cierre hubiera sido un aterrizaje más suave. Estamos trabajando intensamente en resolver problemas importantes, propios del manejo contractual de obras que nos llevan a una actividad bastante plena, problemas del funcionamiento del Conavi (Consejo Nacional de Vialidad) que no escapan al entendimiento después de las tragedias que hemos venido sufriendo, sin presupuesto, con Cochinilla (escándalo por supuesta corrupción), sin contratos de conservación de carreteras, tramitología compleja que tiene la Administración Pública. Pero ese es uno de los eslabones”, afirma.
El jerarca, quien cumplirá 85 años el 3 de marzo, añadió a su lista de tareas la resolución de la adenda con el gestor del aeropuerto Juan Santamaría, con el objetivo de lograr el equilibrio financiero que, por contrato, el Estado debe garantizar.
También mencionó la urgencia de encontrar fondos para reparar, “en el plazo más inmediato posible”, la pista del aeropuerto Daniel Oduber, en Liberia.
“EL SISTEMA ESTÁ TORCIDO, Y YO TRATO DE HABLAR, PERO ¿QUIÉN ME ESCUCHA? ¿A QUIÉN LE HABLO?”. Rodolfo Méndez Titular del MOPT
‘Hay que actuar’. Con estas obligaciones encima, Méndez vuelve a quejarse de la escasez de recursos que enfrentó el Conavi, situación que incluso los ha obligado a tomar recursos de conservación para la construcción de obras, porque “no se había hecho la tarea de modernizar el transporte público”.
“Entonces, hay que actuar. La Administración empieza a tomar recursos de conservación para dedicarlos a construcción para que los carros fluyan. Nos encontramos en una situación en donde más se dedica a la construcción que a la conservación (...).
”El sistema está torcido, y yo trato de hablar, pero ¿quién me escucha? ¿A quién le hablo? La credibilidad institucional es cero, he hecho un enorme esfuerzo para llevarme las ofensas que he recibido por un sentido de responsabilidad, porque no siento que en toda la Administración haya alguien que vea las cosas que yo veo, y esto puede sonar a ser presumido, pero no es mi estilo ser presumido”, dice.
En materia de transportes, el actual gobierno también debe completar la firma de las concesiones de autobuses que, en octubre del año pasado y ante el vencimiento de las autorizaciones vigentes, continuaron operando bajo la figura de permisionarios, mientras se constituían los nuevos contratos, en los que se incluyen condiciones como pago electrónico y sectorización.
Y eso no es todo. También está en suspenso la definición del contrato con la empresa Riteve SyC, cuyo plazo vence en julio próximo, sin que exista un modelo de sucesión definido. La esperanza es que la Contraloría General de la República avale una prórroga de dos años a fin de asegurar la continuidad del servicio, al tiempo que se determina cómo funcionará la revisión técnica a futuro, tarea que recaerá en el próximo jerarca del MOPT.
Otras iniciativas. Aparte de los incendios activos que debería apagar antes de dejar el MOPT, el ministro tiene planes.
Uno de ellos es dejar encaminados al menos dos convenios de crédito por $400 millones con el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) para la atención de rutas en lastre y la reparación de puentes en condición crítica, así como la eventual adenda con el Eximbank de China para las obras complementarias del proyecto de ampliación de la ruta 32 (San José-Limón).
Asimismo, se inició una serie de estudios previos para dar inicio al primer programa de reciclaje de activos en el país, aprovechando la carretera entre Cañas y Liberia. El sistema de reciclaje de activos permitiría aprovechar una obra que el Estado ya construyó, como el caso de ese corredor, y financiar mediante el pago de peajes el mantenimiento del mismo trayecto, así como la construcción de otras obras en la zona.
De estas iniciativas, la más avanzada hasta ahora es el crédito con el BCIE, para el cual ya tiene un aporte no reembolsable, destinado a estudios de factibilidad.
“La enorme ventaja que tiene el procedimiento que se está siguiendo es que, al hacerse los estudios de factibilidad desde ahora, en forma coordinada con el Ministerio de Planificación, nos va a ahorrar muchísimo tiempo en los trámites previos a la aprobación por parte de la Asamblea Legislativa”, explicó.
En tanto, el financiamiento con el banco chino se encuentra en conversaciones por la vía diplomática.
En relación con la iniciativa de reciclaje de activos, el jerarca adelantó que la Corporación Financiera Internacional (IFC), del Banco Mundial, hizo un análisis en el que se determinó la conveniencia de recomendar un proyecto bajo ese modelo para el tramo Cañas-Liberia.
“El tema es que ya aquí lo que conviene es consultar a las nuevas autoridades, si van a querer caminar por eso o no; se tiene una valoración, en principio, de que puede ser interesante en ese proyecto. Se estudiaron varias alternativas (...)”, finalizó.