Árbitra tica debutó antes que jugadoras de la ‘Sele’
››Marianela araya ha participado en otros torneos internacionales
El pitazo de salida para la Copa Mundial Femenina Sub-20 de la FIFA Costa Rica 2022 estuvo a cargo de la réferi nacional Marianela Araya.
La silbatera de 33 años se le adelantó inclusive a la Selección Femenina Sub-20 que debutó ayer a las 8 p. m., contra Australia, en el Estadio Nacional.
Nueve horas antes de ese juego, Araya fue la primera tica en actuar en esta cita mundialista. Ella fue la encargada de impartir justicia en el partido que marcó una de las sorpresas del día, en el que Colombia derrotó 1 a 0 a Alemania, con un gol de Mariana Muñoz, en el Estadio Alejandro Morera Soto.
Esta es la tercera ocasión en la que la réferi nacional porta su gafete FIFA en torneos internacionales femeninos.
La primera Copa del Mundo en la que estuvo presente fue en el Mundial Femenino Sub-17 disputado en nuestro país durante el 2014; la segunda fue en el Mundial Femenino Sub-20 en el 2016, en Papúa Nueva Guinea, y esta vez ocurrió en la Copa Mundial Femenina Sub-20 de la FIFA Costa Rica 2022.
Ella es esa mujer que semanas atrás lloró frente a sus alumnos cuando se percató de que le había llegado la notificación con el nombramiento para pitar en esta cita planetaria. La noticia la conoció cuando se encontraba dando clases de Contabilidad en el colegio.
La emocionaba pensar en que esta ocasión su hijo de dos años estaría en las gradas.
Pero si aquella mezcla de emociones se produjo con la convocatoria a la fiesta planetaria que acapara la atención desde este miércoles y hasta el 28 de agosto, lo que experimentó el martes no se quedó atrás.
Araya se enteró de que le tocaba pitar el primer partido del Mundial Femenino Sub-20 en Costa Rica y de inmediato llamó a sus familiares.
De hecho, todos estaban advertidos desde el nombramiento, porque en aquella ocasión la central mencionó: “Siento maripositas en mi estómago de imaginarme que lleven a mi hijo (de dos años) al estadio y que él diga: ‘Mamá, mamá’... Porque cuando él ve los partidos o ve una cancha de fútbol dice: ‘Partido mamá, partido”.
Efectivamente, en el Morera Soto no solo se vieron aficionados de Colombia y de Alemania, o costarricenses. Ahí la árbitra tenía su propia barra. En las gradas estaban sus papás, que llevaron al hijo de la silbatera y a sus sobrinos. También acudieron tíos y hasta la abuelita de la central, de 90 años.