7.000 ticos recibieron primera dosis contra la covid-19 en agosto
››rezagados alegan, por ejemplo, que querían ver efectos secundarios en otros
Las vacunas contra la covid-19 para adultos están disponibles en Costa Rica desde finales de diciembre de 2020 y para niños entre los 5 y 11 años, desde enero pasado. Esto ha dado tiempo suficiente para que 657.369 personas ya sumen cuatro dosis.
Sin embargo, cada semana siguen llegando a los vacunatorios personas en busca de su primera dosis. Un análisis hecho por La Nación, con base en datos de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), señala que en las cuatro semanas comprendidas entre 1.° y el 29 de agosto (fecha más reciente para la cual hay datos), 7.035 personas acudieron por su primera vacuna contra la enfermedad pandémica.
“Parece mentira que después de todas las campañas masivas, de estar en supermercados, en estadios, en centros educativos y de ir casa por casa, todavía siga apareciendo gente que no se haya vacunado.
”Uno siente que no hay excusa para no haberse vacunado a estas alturas; sin embargo, igual celebramos a cada persona que llega”, destacó Vilma Malespín, directora de Enfermería del Área de Salud de Tibás, administrada por Coopesain R. L.
La cifra de agosto da un promedio de 1.759 dosis por semana a nivel nacional. No obstante, una tercera parte de esas personas (33,62%) fueron por sus vacunas en la última semana; puntualmente, 2.365.
De los nuevos vacunados, 3.982 (el 56,6%) son niños de entre 5 y 11 años y los restantes 3.053 son adolescentes y adultos. Los datos no alcanzan a precisar por sexo y edad.
La CCSS recuerda que cualquier persona puede comenzar cuando quiera su esquema. La ubicación y los horarios de los puestos de vacunación puede revisarse en www.ccss.sa.cr.
Malespín comentó que en el Área de Salud de Tibás son muy pocos los individuos que acuden para comenzar su esquema.
Oportunidades. La mayoría de quienes acuden por su primera dosis son hombres adultos, pero también se ven casos de mujeres (la población más inoculada) y niños (grupo al que ha sido más difícil expandir la campaña).
“Las razones que dan para no haber acudido antes son muchas. Uno a veces no entiende, porque oportunidades han tenido todos los días desde hace más de un año”, manifestó Malespín.
Dentro de las razones que se recogen tanto en Tibás como en otros lugares están que esperaban ver si en otras personas había efectos secundarios, o si las necesitaban para incorporarse a un nuevo trabajo o visitar algún país donde se requiera estar vacunado para ingresar.
Pese a estas buenas noticias, la CCSS sigue haciendo esfuerzos para llegar a estas poblaciones, las más difíciles de inocular.
A este 29 de agosto, había 201.208 habitantes de 12 años y más sin protección, lo que representa el 4,71% de la población en este rango de edad.
La cifra más preocupante es la de 129.485 niños de entre 5 y 11 años sin vacunar, pues representan el 24,64% de este grupo etario.