Salud clausura gradería en nueva sede del Herediano
› Club alega que no gestionó aval porque la ley exonera a edificios públicos
El Ministerio de Salud clausuró la nueva gradería que construyó Fuerza Herediana en el Estadio Carlos Alvarado, de Santa Bárbara, nueva sede del Club Sport Herediano mientras se finaliza la construcción del Eladio Rosabal Cordero.
Según conoció La Nación por dos fuentes cercanas al club, la clausura se dio este lunes, luego de que el equipo florense jugara el domingo a casa llena ante el Municipal Pérez Zeledón.
El 4 de enero, La Nación consultó a Salud, Bomberos y la Municipalidad de Santa Bárbara si la dirigencia del equipo rojiamarillo tramitó los permisos de construcción de las obras realizadas en el inmueble, para garantizar que cumplen con los estándares de seguridad.
El Ministerio y el municipio no han respondido a las consultas, mientras que Bomberos contestó que no ha inspeccionado el inmueble porque, hasta la semana anterior, no había ningún trámite en el sistema APC del Colegio Federado de Ingenieros y Arquitectos (CFIA), donde se les informa a las instituciones cuando hay un proyecto que requiere permisos de construcción.
Ese número de trámite no existe. El Club Sport Herediano respondió a este diario que no solicitó permisos de construcción “porque el estadio es municipal”.
“Estamos hablando de un inmueble propiedad de la Municipalidad y, por lo tanto, no se requiere licencia municipal. Las mejoras en la cancha y demás se realizaron de conformidad con el convenio firmado y vigente (artículo 75 de la Ley de Construcciones)”, explicó el departamento legal del club.
Este apartado en la Ley de Construcciones indica que “los edificios públicos o los edificios construidos por el Gobierno de la República no necesitan licencia municipal. Tampoco la necesitan edificios construidos por otras dependencias del Estado, siempre que sean autorizados y vigilados por la Dirección General de Obras Públicas”.
Las últimas obras realizadas en el Estadio Carlos Alvarado las ejecutó y financió Fuerza Herediana (un ente privado), como parte de un acuerdo con el Comité Cantonal de Deportes y Recreación de Santa Bárbara.
Según explicó Candy Rodríguez, expresidenta de dicho comité, “la inversión de Herediano es cercana a $1 millón”. El equipo remodeló los camerinos y construyó otros nuevos. Además, puso nueva iluminación, cambió la cancha natural por una sintética, construyó palcos y un gimnasio.
El departamento legal del club considera que el “proceso se ha realizado conforme a la ley, las obras son seguras y han sido construidas con altos estándares de calidad y seguridad. En este caso particular, por ser una obra menor y de carácter municipal, varían algunos requerimientos, pero todo bien, estamos casi listos con el APC”.
Marvin Carvajal, especialista en derecho público en el bufete Alta Batalla, considera que el Herediano debió tramitar los permisos. “En primer lugar, ni siquiera una institución pública, ni el Estado, y tampoco una municipalidad, puede obviar cumplir con los requisitos de carácter sanitario y/o los requisitos de prevención de riesgos establecidos en la ley. Si no lo puede obviar el Estado, mucho menos un particular”, explicó.