Lanamme: Cierres no deben atrasar tráfico más de media hora
› manuales resaltan coordinación para minimizar impacto de trabajos en tránsito
Las interrupciones en el tránsito ocasionadas por proyectos viales no deberían implicar atrasos de más de 30 minutos a los usuarios de las vías afectadas.
De acuerdo con Henry Hernández, ingeniero de la Unidad de Seguridad Vial y Transportes del Laboratorio Nacional de Materiales y Modelos Estructurales (Lanamme), el “Reglamento de dispositivos de seguridad y control temporal de tránsito” exige la presentación de un plan cada vez que se lleven a cabo obras viales con cierres parciales o totales.
Este plan debe incluir el ordenamiento vial, indicando rutas alternas debidamente señalizadas.
Además, dependiendo de la magnitud del proyecto, la entidad a cargo debe realizar publicaciones en medios de comunicación nacionales al menos 15 días antes de los cierres en las vías. Hernández agregó que estos planes de control de tránsito deben evaluar el impacto de las obras.
Según los manuales del Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT), uno de los principios fundamentales para el control temporal de tránsito es garantizar su fluidez. Además, enfatizan en la necesidad de coordinación entre el ente rector y los responsables de las obras para implementar medidas que minimicen el impacto en los usuarios.
Hernández subrayó que los planes de manejo de tránsito aprobados por el MOPT deben garantizar “la seguridad y conveniencia” de todos los usuarios, limitando las demoras a un máximo de 30 minutos.
Aunque no se detallan medidas de mitigación específicas, el ingeniero aclara que estas pueden incluso contemplar la construcción de rutas alternas. Recalcó que cualquier acción debe estar respaldada por un análisis para determinar las medidas más efectivas, según el proyecto y la vía intervenida.
‘No era requisito’. El Plan de Manejo Vial presentado para la construcción del nuevo puente en el bajo los Ledezma únicamente consideraba desviar el tránsito de esa ruta cantonal.
Manuel Ordeñana, ingeniero de la Municipalidad de San José a cargo de la obra, explicó que el documento fue revisado y aprobado por el MOPT, pero no incluía recomendaciones para aliviar la congestión resultante del cierre.
El ingeniero insistió en que entre los requisitos del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para los proyectos financiados mediante el programa BID-Cantonal nunca se incluyen estudios de impacto vial que justifiquen medidas adicionales.
Solo se exige, dijo, la presentación de planes de manejo de tránsito, que definen vías alternas y desvíos, y por esa misma razón ese tipo de análisis más detallados no son cubiertos por el préstamo.
La Nación consultó al BID sobre la ausencia de estudios de impacto vial en los requisitos del programa y si considerarán este aspecto en futuros proyectos.
Sin embargo, la respuesta estaba siendo gestionada por la agencia de comunicación al cierre de esta edición.