Entrada a clases dispara solicitud de créditos
Presupuestar y comparar, claves para evitar desbalances financieros
La entrada a clases representa una inversión considerable para la mayoría de los costarricenses, lo cual hace que en este mes se dispare la solicitud de créditos para cubrir esos gastos.
Durante enero, muchos reciben el incentivo del salario escolar; sin embargo, quienes no ahorraron el año pasado o no presupuestaron sus recursos para este fin, deben optar por el endeudamiento.
El salario escolar es un beneficio que recibe el trabajador público —para este año, el monto que canceló el Gobierno supera los ¢160 mil millones—; en el caso del sector privado funciona como un plan de ahorro voluntario.
Comúnmente se usa para adquirir desde útiles básicos, hasta pago de colegiaturas, transporte, entre otros.
“Con la llegada del Salario Escolar miles de trabajadores del sector público invertirán sus ahorros en el proyecto educativo de sus hijos y familiares. A partir de este momento es primordial tener elaborada una estrategia para enfrentar la entrada a clases en cualquiera de los ciclos”, comentó Carlos Barquero, director de la escuela de Negocios de la Universidad Fidélitas.
Los créditos especiales para educación toman protagonismo en el mercado financiero durante esta época.
“Ofrecemos una tasa preferencial del 10,25%, y condiciones beneficiosas para personas con interés en invertir en su formación; las personas pueden utilizar esta línea para educación superior, asistir a seminarios de su conveniencia, talleres de aprendizaje para desarrollar un oficio o especializarse”, explicó Sujeyny Gamboa, jefe de Relaciones Corporativas de Coopecaja.
Las entidades financieras recomiendan reservar al menos el 20% del salario escolar o del ahorro, para asumir futuros gastos que surjan a lo largo del curso lectivo, o bien, para algún proyecto especial durante las vacaciones de medio año.
“El salario escolar es de mucha utilidad para las personas porque no compromete el ingreso mensual del hogar para gastos específicos asociados con la educación de los hijos. Para aprovecharlo en mayor medida se recomienda hacer una lista de gastos y, posteriormente, un comparativo de precios para tomar mejores decisiones de compra”, comentó Eugenia Meza, gerente general de Mucap.
Comprar contra la lista que mandan los centros educativos y comparar precios en diferentes tiendas, son acciones necesarias para evitar desbalances financieros en este inicio de año.
“Lo mejor es evitar influencias del comercio, comparar precios en distintas tiendas es una medida muy útil y, en lo posible, se debe rehuir de endeudarse con la tienda; también se puede hacer un inventario de los artículos que sobraron del año anterior y que se pueden reutilizar, esto para seguir ahorrando”, recomendó Kimberly Quesada, jefa de Asesoría Financiera de Coopenae.
Otra de las alternativas es iniciar con planes de ahorro para el próximo periodo escolar, entre las opciones más buscadas por los clientes está el plan programado o certificados a plazo, ya sea a seis meses o a un año.
“Ofrecemos un crédito escolar, mediante el cual se financia hasta ¢5 millones, a una tasa del 18% y a un plazo de 60 meses; el crédito 3x1 escolar, que subvenciona hasta tres veces el ingreso bruto, así como la refundición de deudas, con el cual se genera una menor carga financiera y mayor liquidez. La tendencia crece también por familias que aprovechan los últimos días de vacaciones”, explicó Jorge Solano, gerente general de Coopemep.