“Innovación y apoyo estatal, prioridades para hacer crecer el agro”
¿Se ha estancado el agro nacional como sector productivo, cómo llevarlo al siguiente nivel?
Sigue siendo un sector dinámico y creciente. El futuro también es promisorio. Vivimos una época de explosión demográfica mundial sin precedentes. La población mundial crece en diez años lo que antes tardábamos 300 años.
La competencia internacional es feroz. Los tratados de libre comercio en términos generales han dinamizado el sector agrícola con nuevos mercados y condiciones de acceso privilegiadas en más de 50 países. También hemos tenido que abrir nuestras fronteras a otros.
Aunque es una balanza comercial positiva para Costa Rica, donde por cada dólar agrícola que importamos; exportamos cuatro dólares, los retos son muy complejos. La competitividad local y productividad del sector son indispensables para competir a nivel internacional y local. ¿Cuáles productos tienen potencial o darle valor agregado?
Dos focos: innovación y coordinación interinstitucional.
Innovación incluye no solo valor agregado sino el desarrollo de productos no tradicionales.
Crecimientos mundiales de doble dígito y demanda insatisfecha. Productos como pitahaya, mangostán, guanábana, maracuyá, uchuva, ipecacuana, pejibaye y carambola, que por sí mismos o como insumos para la industria alimentaria, pueden entregar y cobrar un alto valor agregado dadas sus propiedades funcionales.
Además, existe potencial en la industria farmacéutica a base de plantas medicinales, valoradas por la extracción de ingredientes activos demandados por la industria.
Tenemos un comité interinstitucional en el que participamos junto a ministerios y la UCR para promover los productos incipientes, con el fin de aumentar el volumen de producción y superar diferentes barreras, entre otros. ¿Qué hace falta de impulso desde lo gubernamental?
Existen retos en infraestructura, financiamiento, costos laborales y tramitología.
El sector necesita un mayor apoyo financiero a través de líneas de crédito adaptadas a sus requerimientos, así como contar con una Banca para el Desarrollo con programas enfocados a sectores de mayor potencial de exportación como el agropecuario y productos de aseguramiento de cosechas, que no solo consideren el valor final de los productos, sino que además tomen en cuenta el valor de los procesos de cultivo, dándoles mayor certeza y continuidad.
Es imprescindible que el sector cuente con acompañamiento técnico para la implementación de mejores prácticas de siembra y tramitología expedita en aprobaciones de Análisis de Riesgos de Plagas (ARP) en cada mercado donde existan oportunidades comerciales identificadas por Procomer, en alineación con Comex y el MAG. Y desde lo privado, ¿qué hace falta para una mayor inversión?
Buscar mejores opciones logísticas a mercados lejanos, pero por otra, también deben buscar soluciones en conjunto con los oferentes logísticos, pues existen oportunidades que por tiempos de trasiego no se logran concretar.
Es importante que el empresario entienda que las certificaciones son una inversión y no un gasto, estos deben certificarse en Global Gap, Fair Trade, Orgánica, Rain Forest, y algunas otras.