LUCIANA ALVARADO

GIMNATSA OLÍMPICA

¿En qué momento se dio cuenta que estaba clasificada?

Debido a la pandemia, competimos en cuatro subdivisiones, yo estaba en la segunda. La rutina me salió bien, tuve mi mejor puntaje, solo era esperar a México y Perú en otras subdivisiones, que tenían mucho chance. Esperé alrededor de cuatro horas hasta que terminaron y ya era oficial.

¿Cómo fueron esos primeros y pensamiento posterior a la obtención del boleto a Tokio?

Estaba nerviosísima, esperar fue lo más difícil, ya cuando salieron las últimas clasificaciones, me abracé con mi mamá, todo el mundo me empezó a llamar, mucho apoyo. Fue un momento muy chiva.

¿El hecho que fuera a puerta cerrada le ayudó?

Sí, eran prácticamente nueve gimnastas a la vez, eso nunca pasa, siempre son esa cantidad por aparato, osea unas 40 personas en una misma hora. En cambio esta vez fue muy tranquilo, solo los jueces y entrenadores. Eso me calmó.

¿Cuáles son sus pruebas favoritas?

Me gusta más entrenar en barras asimétricas pero aparentemente soy mejor en viga de equilibrio, donde gané oro en el Panamericano.

¿Cómo maneja sus estudios a distancia?

Toda mi primaria la hice en el Saint Claire, en sétimo ya entrenaba doble sesión y se me complicaba aunque siempre me daban permisos. A mediados de sétimo inicié en la Academia de Soluciones Educativas a distancia, así saqué el cole. Ahorita saco generales en la UNED y quiero estudiar filología inglesa.

¿Cómo toma competir con una gimnasta de la calidad de Simone Biles, siete veces campeona de EE.UU. y plurimedallista olímpica?

Es impresionante, ella es la mejor de todos los tiempos, pude competir con ella en Stuttgart en el Mundial de 2019, la vi competir. Desde 2013 gana todos los mundiales prácticamente. Y va a seguir ganando hasta que se retire.