LA CARA LE CAMBIÓ
El programa “Tu cara me suena” le cambió la cara por completo al comediante y locutor Bernardo “Choché” Romano.
El alajuelense aseguró que haber estado en el espacio de Teletica lo llevó a tomar varias decisiones importantes para su salud física y mental.
Animarse a bajar más de 20 kilos, dejar los “tamarindos” y acercarse más a Dios han sido parte de sus grandes cambios en menos de un año.
“Choché” nos contó cómo hizo para ser ahora prácticamente otra persona.
–Hace un año exactamente lo despidieron de canal 9, ¿cuánto siente que ha cambiado su vida desde entonces?
–Mi vida ha cambiado prácticamente 180 grados. Hace un año estaba en un lado y ahora estoy en uno que ni imaginaba (canal 7).
De un pronto a otro ya no hay cheque quincenal de canal 9 y sigue estando la deuda del carro, el celular lo cobran todos los meses y hay asuntos pendientes y a raíz de eso más bien siento que se da el crecimiento del Show de Huevos como empresa independiente. Dejó de ser algo más que un programa de dos amigos que desde hace catorce años trabajan juntos y ahora tenemos una productora y una agencia de eventos.
–¿A raíz de qué toma la decisión de prestarle atención a su salud?
–Empiezo a bajar de peso porque ¿cómo es posible que a mis 27 años empiezo a padecer de presión alta, de apnea, de no poder dormir bien?, mi condición física era fatal. La radio (OK! 105.5 F.M.) queda en un segundo piso, subía las gradas y llegaba ahogándome. Cuando ya uno llega al punto más crítico es cuando se pregunta ¿cómo llegué hasta aquí?
–¿Cuándo toma la decisión de empezar a bajar de peso?
–Entré a ‘Tu cara me suena’ gordo y salí delgado y sin pelo, fue una mutación (risas). Fue mucho por impulso de Ash (Ashley García, su exnovia), ella me impulsó muchísimo. Ash siempre estuvo ahí porque ella vende un producto que se llama Ketopia, que fue el que me ayudó en gran parte.
Ella (su expareja) siempre me decía que lo probara, pero yo le decía que en otro momento porque me gustaba mucho comer cochinadas, tomaba cerveza, ya no tomo. El dejar de tomar me ayudó muchísimo. Tuve que aprender a comer a mis horas, antes quizá comía dos veces al día, ahora como seis veces. –¿Y en qué consiste ese producto?
–Es un plan nutricional que tiene varios productos, en una semana consumís productos de la marca y durante un mes hay que seguir un régimen alimenticio. Todo supervisado por una nutricionista.
– ¿Aparte del licor qué mas dejó de consumir?
–Como de todo, de hecho como más de cuando comía mal. Lo que pasa es que ya no como como si mañana me fueran a ejecutar en la silla eléctrica.
¿Cuánto le falta bajar para estar en su peso ideal?
–Tengo que bajar dos kilillos más para estar en mi peso ideal, según la tabla nutricional.
Estoy en 77 kilos y tengo que llegar a 75, pero digamos que ya me siento bien así. Empecé con 95 kilos casi, estaba muy gordito.
–Hace unos meses su papá estuvo en el hospital por un problema en el corazón. ¿Ese susto también lo hizo recapacitar y echar para su saco?
– De hecho mi papá también ha bajado muchísimo de peso. Él está llevando un plan con una nutricionista. Como le dio un infarto por descuido de su salud eso me hizo también poner las barbas en remojo, el ver tantos amigos que padecen obesidad. Es increíble que Costa Rica es uno de los países con mayor nivel de obesidad juvenil, ni siquiera es en adultos.
Puedo decirle que estoy en un punto de mi vida donde me siento pleno, seguro, feliz y ya no me siento solo, eso me tiene muy contento.
–¿Y qué más está haciendo para lograr el peso que desea?
–Retomé el ejercicio. Ahora estoy nadando, estoy jugando fútbol y estoy haciendo ejercicio funcional con Yiyo (José Miguel Alfaro).
La ayuda espiritual me ha ayudado también porque uno entra en depresión cuando está gordo, cuando está descuidado físicamente uno no se siente bien y creo que había descuidado mucho mi relación con Dios, me volví mi dios entonces tuvo que quebrárseme mi dios para entender que yo, por mí mismo, no puedo hacer absolutamente nada sin ayuda de Él.
Hasta que logré caminar conforme a esas cosas, muchas cosas de mi vida han cambiado y yo lo único que he hecho es obedecer, porque Él es como un papá que le dice al hijo ‘obedezca, haga caso’.
–Ahora que tocó el punto espiritual, ¿está asistiendo a una iglesia o a algún un grupo cristiano?
–Lo que tengo es una relación personal con Dios, es la primera vez que tengo esa relación continua con Él.
Asisto a un grupo y me congrego pero prefiero reservarme el nombre (de la iglesia) y como crecimiento personal estoy en varios grupos de estudio donde me enseñan a leer la Biblia yme enseñan a vivir conforme el libro que nos dejaron.
–¿Qué lo hizo acercarse más a Dios?
–Una depresión fuertísima (no quiso decir si fue por su ruptura amorosa la cual se dio mientras estaba en ‘Tu cara me suena’) y de tener pensamientos de que mi vida ya había llegado a un punto que no valía para nada y que para qué me levantaba cada día.
–¿Tuvo que cambiar su forma de hablar en sus presentaciones por su pensamiento espiritual?
–Antes de tener un encuentro espiritual, o lo que sea, ya había entendido junto con “Yiyo” que entre menos vulgar la gente disfruta más. Hemos fallado y metido las patas mil veces, pero de eso hemos aprendido.
–¿Se sigue presentando en bares pese a que sabe que hay licor?
–Por supuesto, mi principal enemigo soy yo, entonces yo sabré hasta dónde exponerme y cuáles fueron las cosas que me hicieron llegar de donde salí.
Pero entre más pueda evitar las cosas que me lleven a ese punto mejor.