¡HALA, PURA VIDA!
NIÑOS DE LA ESCUELA REAL MADRID DE GUARARÍ DE HEREDIA TUVIERON UNA VISITA MUY ESPECIAL
Enolvys Estrada Campos es una de las niñas de la Escuela Socio Deportiva Fundación RealMadrid Costa Rica, que ha vivido tres días fuera de lo común.
La jovencita, de 13 años y de Guararí de Heredia, es una de los 125 alumnos que están en un proyecto salido de lo común.
En esta escuela usan el deporte para preparar a los niños para el estudio, las relaciones con sus semejantes y la vida misma.
Ninguno de ellos paga nada por estar allí, lo están como parte del compromiso que tienen los merengues en el mundo mediante la Fundación Real Madrid.
Con la ayuda de empresas cómplices se desarrollan en diversos países, principalmente en zonas de población humilde o con algún tipo de riesgo social.
La meta final es sacar personas de bien, más allá de cualquier ambición deportiva.
“Esa necesidad de ayudar se convierte en obligación cuando vez que a través de esa marca podemos ayudar a otros, por esa razón en 1999 se instaura la Fundación Real Madrid”, explicó David Gil Chapado, Director Técnico Deportivo de la Fundación.
El español está en Costa Rica para capacitar a los maestros y entrenadores con respecto a los métodos aplicados en lo más de 70 países en el que tienen escuelas.
Voluntarios de la ONG Seprojoven Guararí, y las empresas Globalvia Ruta 27, Accenture y Universidad Latina también meten el hombro.
Citas en odontología, psicología u oftalmología son parte de otros beneficios. Todos ellos gratis.
Ilusión. Enolvys recordócon mucha ilusión como gracias a la escuela visitó Madrid y conoció a Keylor Navas en el Santiago Bernabéu junto a cinco compañeritos.
“Fue muy chiva, esa vez fuimos al estadio y cuando vi a todos los jugadores me puse a llorar de la emoción, conocí a Keylor y fue muy bueno con nosotros”, recordó la jovencita que tiene a la BBC merengue (Bale, Benzema y Cristiano) entre sus grandes ídolos.
Otro aspecto importante es la capacitación que se les da a los tatas para que apoyen a sus hijos. Guararí es una zona dirigida por muchas mamás jefas de hogar.
“Estoy llevando un curso de computación que me da la fundación y a los chicos les dan muchos otros. A mis hijos les ofrecen la oportunidad de cumplir un sueño y que se puedan preparar gracias a los estudios”, detalló doña Rosa Torres, quien vive en Villa Paola de Guararí.
Ella, como muchas mamás, quiere aprovechar esta oportunidad para que un barrio peligroso no se lleve a sus hijos y sean personas que burlen los obstáculos y las malas juntas.