Pipita se desquitó
del argentino Gonzalo Higuaín permitió a la Juventus impedir la remontada de un Nápoles valiente y metió al club turinés en la final de la Copa Italia, en la que se enfrentará a la Lazio.
La Juventus, rival del Barcelona en la Liga de Campeones, se había adelantado en dos ocasiones, gracias al exnapolitano Higuaín, pero los locales nunca dejaron de luchar y remontaron hasta el 3-2, con los goles del eslovaco Marek Hamsik, el belga Dries Mertens y Lorenzo Insigne.
Los bianconeri triunfaron en el partido de ida el miércoles pasado 3-1 en Turín y clasificaron por un marcador global de 5-4.
El Pipita volvía a jugar en el San Paolo napolitano cuatro días después del partido empatado a uno en la Serie A, fue silbado por la afición que antes lo amaba y les contestó con dos goles fundamentales para sellar el pase a la final de la Copa.
Para el recuerdo quedará su celebración al marcar el primer pepino, el argentino pegó un grito dirigido a Aurelio De Laurentiis, presidente del club napolitano: “¡Es tu culpa!”.
Higuaín no se contuvo para celebrar ante una afición que lo maltrató durante dos partidos segui- dos con todo tipo de gritos.
Desde que llegó a la Juventus, el Pipita culpa a De Laurentis como el responsable de su salida de Nápoles por la mala relación que tenían la temporada pasada.
Los turineses disputarán el próximo 2 de junio en el estadio Olímpico su tercera final de copa consecutiva, en la que defenderán sus últimos dos títulos contra la Lazio.
Tanto el Nápoles como la Juventus salieroncon unas alineaciones repletas de cambios con respecto a cuando se midieron en la Serie A el pasado domingo, y realizaron seis y ocho variantes respectivamente para la copa.
En el Nápoles volvió a la titularidad el portero español Pepe Reina, con el polaco Arkadiusz Milik que salió desde el comienzo en la delantera.
En Juventus, el argentino Paulo Dybala y el colombiano Juan Guillermo Cuadrado acompañaron al Pipita en la ofensiva.
El final del partido fue muy intenso, el Nápoles necesitaba dos goles más y la Juve reforzó la defensa con el seleccionado italiano Andrea Barzagli, en sustitución de Dybala, pero nada cambió y la Vechia Signora de nuevo sonríe.