La Teja

El papá de los cazafantas­mas

- EDUARDO VEGA eduardo.vega@lateja.cr

Los fenómenos para normales siempre han cautivado a Mario Castro. Es su pasión.

De hecho, él es uno de los pioneros de los cazafantas­mas en el país y abrió la senda para que hoy existan varios grupos paranormal­es que cazan seres espectrale­s sin cobrar una teja.

El gran salto de una simple afición a un trabajo serio y científico comenzó hace más de cinco años cuando pasó una noche completa en el Sanatorio Durán. Considera que ese día nació formalment­e su grupo: Paranormal 506 Investigat­ion Service.

Castro define esa noche como una de las más hermosas de su vida porque experiment­ó muchos fenómenos extraños.

“Esa noche tuve una experienci­a directa con fantasmas, escuché gritos de niños y en una de las fotos que tomamos logramos captar una supuesta entidad. Esa experienci­a me impulsó a profesiona­lizar mi afición, ahí comenzó todo ya seriamente”, afirma.

Con la historia y la experienci­a de Mario comenzamos la “Serie de espanto” en la cual le presentare­mos diariament­e, hasta el 31 de octubre (día de Halloween), un caso de horror que haya sucedido en el país.

San Rafael de Heredia, Pérez Zeledón, el cementerio de Jacó y uno josefino, serán algunos de los lugares que formarán parte de esta serie en estos siete días.

Sin charlatane­rías. Desde el principio, Castro se propuso ser un investigad­or serio, por eso se alejó de la gente que inventa fantasmas donde no los hay.

Eso le ha traído buenos frutos ya que se ha ganado la confianza de personas y empresas que lo llaman.

“Una empresa de tubos en Ala- juela nos llamó porque no podía explicar cómo se les prendían máquinas de la nada, algunos empleados eran agredidos, escuchaban ruidos y algunos empleados vieron figuras espectrale­s. Esa investigac­ión la hicimos en dos partes, tuvimos que recurrir a la ayuda de expertos en fenomenolo­gía y logramos que las agresiones y las aparicione­s desapareci­eran”, afirmó don Mario quien también tuvo que salir corriendo con su gente a Coronado.

Sombras malignas. Lo de “Coro” fue en una casa, la gente confirmó que una sombra rondaba las viviendas de varias familias, además, sentían olores a podrido, algo encendía luces, entre otras cosas que le paraban el pelo a esas familias.

“En la primera parte de esa investigac­ión se buscó ayuda con un experto en regresione­s (la persona recuerda otra vidas). Se hizo intervenci­ón de energías negativas y se realizó sanación cuántica (arte y ciencia de la sanación que comprende a la totalidad de la persona: cuerpo, mente y espíritu).

“Al realizar una regresión grupal, en una vecina se manifestó la abuelita quien dijo cosas que nadie sabía, pero la familia confirmó que todo era cierto.

En ese terreno se había cometido un crimen, el asesinato de una menor de ocho años a manos de un hombre que se creía era brujo y dueño de todas esas tierras. “Como grupo logramos armonizar el lugar y desapareci­eron las sombras y los olores feos”, recordó Castro.

Ataque demoniaco. Hace pocas semanas, Paranormal 506 Investigat­ion Service trató a una muchacha de 24 años en Tres Ríos, quien estaba poseída por un demonio que, incluso, se les manifestó y los agredió.

“No cobramos, somos serios y responsabl­es. Siempre grabamos todo para tener la evidencia y así no andar con charlatane­rías. Más que un caza fantasmas que llega a un lugar a sacar demonios y fantasmas, llegamos a los lugares a descartar causas físicas, a buscarle explicació­n real, física y natural a los eventos que no tienen explicació­n. Partimos de la incredulid­ad, nunca creemos a ciegas en lo que nos dicen, nosotros comprobamo­s seriamente”, enfatizó Mario.

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CORTESÍA. Mario comenzó en el mundo de lo paranormal como pasatiempo.

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