45 mil gritan porque las protejan
La violencia doméstica que sufren muchas mujeres en Costa Rica hace que, en promedio, cada año 45 mil de ellas alcen la voz y pidan a las autoridades que les den medidas de protección.
Ana Hidalgo, coordinadora de Violencia de Género del Inamu, asegura que la mayoría de mujeres que muere a manos de sus compañeros sentimentales o exparejas nunca se atrevieron a denunciar los malos tratos que recibían por parte de ellos.
“Si comparamos la gran cantidad de solicitudes que recibimos por parte de mujeres, que piden medidas de protección por violencia doméstica, contra los femicidios reportados en los últimos tiempos (que van entre 20 y 30 por año), vemos que en realidad sí sirve denunciar, porque esas medidas ayudan a salvar vidas”, aseguró Hidalgo.
La especialista agregó que las autoridades judiciales también reciben un promedio anual de 20 mil denuncias penales por agresiones físicas y psicológicas de hombres hacia mujeres.
Les cuesta decidirse. La funcionaria dijo que a muchas de estas víctimas les cuesta muchísimo decidirse y denunciar a los agresores y es por eso que el Instituto Nacional de las Mujeres da consejería y apoyo a las que lo ne-
cesitan.
“Nosotros damos asesoría a mujeres con o sin denuncia por violencia doméstica. Para muchas víctimas de agresión es difícil ir a solicitar medidas de protección y por eso buscan orientación con nosotros.
“Aquí analizamos cada situación, valoramos el riesgo y llevamos un proceso de empoderamiento personal, para que las mujeres salgan adelante de esa situación que las pone en riesgo”, explicó Hidalgo. Según datos del Observatorio de Violencia de Género Contra las Mujeres del Poder Judicial, en los últimos diez años las cifras más altas de homicidios contra esta población se dieron en el 2008, con 18 crímenes; el 2009 con 15; el 2017con 14 y el 2011 con 12.
Costa Rica de luto. En las últimas semanas varios casos en que una mujer ha muerto a manos de su expareja o compañero senti- mental han causado gran indignación en el país.
El caso más reciente se dio el domingo pasado en la madrugada cuando Kimberly Barrantes Pérez, de 20 años, fue asesinada deun balazo mientras dormía en un cuarto con su mamá y sus dos hijas de dos y un año.
En el ataque resultó herida Yorleny Pérez Córdoba, mamá de la muchacha.
El único sospechoso de la salvajada es un hombre de apellido Campos, quien tuvo una relación sentimental con la joven y es el papá de las dos bebés de Kimberly.
Este martes en la tarde el Juzgado de Siquirres le impuso un mes de prisión preventiva (Ver nota en la página 6).
Otro de los homicidios recientes se dio el viernes pasado cuando Grettel Tatiana Téllez Ortiz, de 18 años, murió al recibir al menos diez balazos. El hecho de sangre se dio en Linda Vista de La Unión de Cartago, cerca delabastecedorLos Gemelos.
El cuerpo fue encontrado por una hermana de la fallecida que salió de la escuela y llegó a la casa, a eso de las 2 p. m.
En ese momento encontró a Grettel tendida en el corredor y a su lado estaba la hija de la víctima, una niña de solo dos años, quien no sufrió ningún daño.
Según contó Luz Téllez, mamá de la joven asesinada, el jueves pasado en la noche su hija le había dado la noticia de que estaba esperando su segundo hijo.
En cuanto al agresor, la Fuerza Pública dijo que se manejan varios nombres, pero no podían revelar más información.
Se dio a conocer que la familia de la joven tiene serias sospechas sobre un exnovio de Grettel.
“¡Eduardo, no!”. Rita Arias Piedra, de 26 años, también perdió la vida luego de que su pareja sentimental, Eduardo Quintero, la atacara a tubazos.
La salvajada ocurrió el 10 de marzo, en la propia casa de la pareja, en Golfito, y frente a la hija de ambos, de solo cuatro añitos.