Chepito y el riesgo del Sable
A inicios de mayo, la liberación de un violador en serie, de
47 años, escandalizó a España. Estuvo veinte años tras las rejas.
Entre 1997 y 1998 amenazó y abusó de mujeres jóvenes. La policía lo acusaba de unas
40 violaciones, pero solo le probaron 15.
Su historia tiene gran similitud con la del maripepino Henry Marín Quesada, de 45 años, conocido como El Sable, de quien ofrecimos una serie de reportajes la pasada semana. El Sable lleva preso 21 años, de una pena de 156 años que se rebaja a 50, por siete violaciones de mujeres pero pudieron ser 15.
Lo capturaron en abril de
1999. Siempre atacaba en la parada de buses cercana al centro comercial Real Cariari, en la autopista general Cañas. El violador español asegura estar rehabilitado. Pero la Fiscalía española activó un protocolo especial tras recibir un informe de los servicios penitenciarios de un “riesgo moderado o alto de reincidencia”. Es decir, en cualquier momento vuelve a atacar.
La abogada de las víctimas dice que los servicios penitenciarios fueron incapaces de rehabilitarlo.
El Sable tiene dos años de estar en la cárcel de Pérez Zeledón, tiene buen comportamiento y se matriculaen cuanto curso hay para hacer puntos con la fe de pasar a un régimen de confianza en un corto plazo.
Su caso debe ser examinado con lupa por las autoridades, tan dadas a vaciar nuestras cárceles.