CENSO SERÍA MULTICOLOR
Para el censo del 2020, no se sorprenda si el personal responsable de realizar las encuestas le tira preguntas como, ¿en su familia hay alguna persona gay?, ¿cuántos son? y otras cosas por el estilo.
Lo que pasa es que el Estado pretende censar a la comunidad homosexual del país y para ello es necesario incluir ese tipo de preguntas en los cuestionarios.
Tampoco se extrañe si en las encuestas de hogares que se efectúen antes del 2020 también le hacen ese tipo de preguntas.
El Gobierno desea ir contando a los homosexuales que viven en el país para hacer los ajustes que correspondan para atender adecuadamente las necesidades de la comunidad LGTBI.
La iniciativa es del comisionado presidencial para asuntos de la población LGTBI Luis Eduardo Salazar, quien fue nombrado por Carlos Alvarado para ser una especie de enlace entre los homosexuales y el Gobierno.
“La idea es que en el censo del 2020 vengan variables que incorporen esos análisis de identidad de género y orientación sexual.
“Antes de esa encuesta nacional, queremos incluir en las encuestas de hogares esas variables, pero hay que revisarlo con el INEC para ver qué tan flexible es por cuestiones de tiempo”, explicó Salazar.
Los último censos en el país fueron en los años 2000 y 2011.
Solución a problemas. El comisionado agregó que también aplicarían una política de sensibilización de la población.
Además, los resultados que se obtendrían de esas encuestas serían generales (no personales), para que el Estado pueda definir políticas que brinden solución a algunos problemas propios de la comunidad LGTBI.
“Esunapoblación quehaestado históricamente invisibilizada, donde no hay registros y queremos datos que vayan más allá de saber cuántos son, si no determinar, por ejemplo, cuál es la expectativa de vida de una población como la trans”, dijo.
Según el comisionado nacional, al no haber datos, el país no tiene información suficiente para gestionar políticas que tengan un respaldo en algo.
Debe ser bien pensado. Pero la labor no es tan sencilla. No se trata de pedirle al Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) que incluya un análisis más y listo, pues esa institución tiene lineamientos, procedimientos y un presupuesto que debe respetar.
Para incluir nuevas preguntas se debe tener un argumento teórico que justifique un por qué.
Según Pilar Ramos, coordinadora del área de Divulgación y Estadística del INEC, las razones que nos dio Salazar son muy válidas, pero aún deben coordinar un primer contacto para escuchar el planteamiento en su totalidad.
“Eso que él dijo son aspectos que son fundamentales en términos de justificación y bajo el enfoque de derechos humanos y en vista de que no conocemos la magnitud de la población afectada, noso-
“Censarlos es útil para hacer políticas que respondan a sus necesidades ”. LUIS EDUARDO SALAZAR COMISIONADO PRESIDENCIAL
tros podemos escuchar”, dijo.
Eso sí, Ramos asegura que el INEC omite cuestionarios que tengan que ver con opiniones, objetividades o actitudes.
“Si algo se plantea debe ser de utilidad, de mejorar alguna política pública, pero también hay otros aspectos más administrativos como cuál es el costo, si existe el financiamiento y si el INEC tiene la capacidad técnica de realizarlo. Algunas veces son conceptos muy difíciles”, comentó Pilar Ramos.