WHATSAPP SOLTÓ LA SOPA
El lunes 18 de junio en horas de la tarde empezó a circular un mensaje anónimo por WhatsApp muy bien escrito, informando de divisiones dentro del grupo de seleccionados.
Hablaba con nombres y apellidos, decía que luego de caer contra los serbios, algunos le reclamaron por el rendimiento a David Guzmán y a Johan Venegas.
Y, ¡oh sorpresa!, en el mismo mensaje se hablaba de división entre el cuerpo técnico y que jugadores como Celso, Navas o Ruiz, quienes habrían preferido que el entrenador del equipo fuera otra persona, pese al respeto que tenían por el Machillo.
“Siempre se supo que existían tres bandos bien definidos: los que juegan en Europa, los que están en la MLS y los jugadores del campeonato local, que un día apoyan a uno de los dos primeros grupos y el otro día se ponen del lado del otro”, se leía en el famoso mensaje que llegó a los celulares de los jugadores en San Petersburgo.
El martes 19 de junio salieron a desmentir el mensaje Rodolfo Villalobos, presidente de la Fedefutbol, y Bryan Ruiz.
Dos días después fue Óscar Ramírez quien tocó el tema. Se limitó a decir que las apuestas y los juegos dentro del grupo eran normales, que nunca había tenido que intervenir en ninguna situación porque tenía un grupo de jugadores educados.
Eso sí, tiró una chinita cuando contó que si alguien del grupo estaba pasando información, tendría que hablar con esa persona.