Candado a casa de “masajes”
Una mujer de apellidos Castro Guerrero y 63 años fue detenida por ser sospechosa de prostituir mujeres en una supuesta “sala de masajes”.
La agarraron este miércoles en la tarde en el lugar donde al parecer se daban los delitos, muy cerca del paseo Colón, en San José.
El Organismo de Investigación Judicial informó que Castro se hacía pasar por la administradora de la sala, pero en realidad era quien cobrabaa quienes llegaban a pedir servicios sexuales.
La mujer les cobraba ¢20 mil por hora. Según determinaron los agentes a cargo de la investigación, Castro cobraba y les daba una parte a las mujeres.
Cuando los agentes llegaron a revisar el local encontraron a cuatro mujeres con edades entre los 25 y los 30 años. Tres son ticas y la otra nicaragüense.
Los investigadores allanaron el comercio y decomisaron plata, celulares y otras evidencias.
La sospechosa fue llevada a las oficinas del Ministerio Público para que la interrogaron. Ahora está a la espera de una audiencia de solicitud de medidas cautelares.
Caso parecido. El 28 de junio las autoridades judiciales acabaron con el negocio de otra sospe- chosa de proxenetismo en Escazú.
Varios oficiales de la Policía Municipal de Escazú y del OIJ llegaron a otra supuesta “casa de masajes” que desde hacía meses operaba en Los Anonos.
Ahí detuvieron a una mujer de apellidos Castro Arauz y de 32, quien, al parecer, era la que ofrecía los servicios sexuales de varias muchachas entres los 20 y 30 años. Cuando los uniformados llegaron en la vivienda había seis jóvenes.
Luis Ángel Ávila, subdirector interino del OIJ, dijo en esa ocasión que la sospechosa llevaba una agenda con las citas que conseguía para las mujeres por medio de las redes sociales.
Ese caso era investigado desde inicios del año, cuando una persona alertó de la situación por medio de una llamada confidencial al 800–8000–645.