TREN MEJENGUERO
El fútbol tiene cosas extrañas como animales dentro de un terreno de juego y hasta caídas graciosas; sin embargo, lo que pasa en Cierny Balog, un pequeño pueblo de 5.000 habitantes en Eslovaquia, es realmente insólito y los ha hecho mundialmente famosos.
El “Cierny Hron”, popularmente llamado el “Gran Negro”, es un tren a vapor que tiene un recorrido bastante curioso, ya que en determinado momento pasa entre el espacio que divide la tribuna del campo de juego en un estadio de fútbol.
Como era de esperarse, a pesar de ser solo un territorio con tan poca población, el fútbol es bastante practicado. Por eso este pueblo, que pertenece al distrito de Brezno, en Eslovaquia, quiso construir un terreno de juego, pero la bronca es que no había muchos espacio.
Cierny Hron era el tren que transportaba desde 1898 a 1982 la madera y a los empleados de los aserraderos de la co- marca de Cierny Balog. Los rieles de dicho transporte se ubicaban justamente donde se quería
construir el estadio.
Se quedaron. Cuando se acordó hacer el recinto, las líneas de dicho tren estaban cerradas, aunque igual se respetaron las rieles. Años después de inaugurado el estadio, se reactivó el servicio ferroviario y, contrario a lo que se pensó, no supuso nin- gún problema para el club.
A los aficionados del TJ Tatran Cierny Balog de Eslovaquia no les incomoda en lo más mínimo este hecho y siguen disfrutando del fútbol.
Espectáculo. En los vídeos grabados por los aficionados se aprecia perfectamente como el tren pasa mientras los jugadores se disputan el balón. Pese a que el humo impide por momentos que los espectadores puedan seguir el partido, el paso de la máquina es el momento de delirio máximo en la grada, aficionados y pasajeros se saludan en un momento mágico.
Mención especial para el maquinista, quien hace su triunfal ingreso al estadio saludando a la grada y sonando la bocina de la locomotora.
En 1992, este ferrocarril se declaró patrimonio cultural por petición popular. Se restauraron los 17 kilómetros de la línea que separaChvatimech y Cierny Balog para completar un recorrido cultural a los visitantes de esta región montañosa de Bratislava.
Así es como un estadio aficionado se ha convertido en una atracción turística de primer nivel, aunque el tren por el que se ha hecho famoso solo pase 4 veces al día.