Chepito y el miedo a despeinarse
Miedo a despeinarse, esa fue solo una de la lluvia de críticas que recibió, merecidamente, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, por no ir a un cementerio en Francia, debido al mal tiempo, en el que hay enterrados miles de soldados estadounidenses que murieron en la Primera Guerra Mundial. Quienes sí se mojaron fueron el presidente francésEmmanuel Macron y la canciller alemana Angela Merkel. “Murieron haciendo frente al enemigo y este patético incompetente Donald Trump no puede desafiar el tiempo para homenajear a los caídos”, criticó Nicholas Soames, nieto de Winston Churchill, uno de los grandes líderes ingleses que enfrentarona Hitler en la Segunda Guerra Mundial.
Ese que no se quiso mojar los cuatropelos que le quedanes el responsable de tener al mundo patasarriba al promover las divisiones entre los pueblos, esas que desataron las dos grandes guerras mundiales.
Macron advirtió que los “antiguos demonios” que provocaron millones de muertes volvían a levantar cabeza. Se refería al auge del populismo en Estados Unidos y Europa. “El patriotismo es el opuesto exacto del nacionalismo: el nacionalismo es una traición al patriotismo. Cuando las naciones ponen por delante sus intereses y toman la actitud de no importarle los demás borran lo más precioso que puede tener una nación sus valores morales”. ¿Le habrá entendido Trump?