La Teja

Ve morir al j e fe

- ADRIÁN GALEANO CALVO Y ALFONSO QUESADA Periodista y correspons­al

Don Luis Antonio Muñoz Muñoz vivió una de las experienci­as más rudas de su vida, la mañana de este jueves, pues vio como su jefe falleció a su lado luego de que el camión en el que viajaban fue chocado de frente por un carro, cuyo conductor también murió.

El fatal accidente ocurrió a eso de las 4:55 de la mañana, precisamen­te en el cruce de Dominical de Osa, en la carretera Costanera Sur.

Los fallecidos fueron identifica­dos por la Policía Judicial como Robert Lindley Smith Méndez, de 50 años, quien iba manejando el camioncito cargado de mariscos, y Marco Vinicio Pacheco Rodríguez, de 35 años, conductor del Toyota Yaris blanco, quien era vecino de Naranjo de Alajuela.

De acuerdo con la versión de las autoridade­s, el accidente ocurrió debido a que el joven Pacheco Rodríguez, quien iba en dirección Quepos-Dominical, perdió el control del vehículo y chocó contra una parada de bus, continuó varios metros sobre la acera y luego invadió el carril contrario para finalmente pegar de frente contra el camión de mariscos, el cual quedó volcado por el bombazo.

La Cruz Roja y el Cuerpo de Bomberos enviaron varias unidades para atender el accidente, pero cuando los rescatista­s llegaron el único que aún estaba con vida, pero prensado entre las latas del camión, era don Luis Antonio.

Los paramédico­s lo liberaron y lo llevaron al hospital Tomás Casas en Ciudad Cortés.

Día de trabajo distinto. Pese a lo aparatoso del accidente, don Luis Antonio afortunada­mente no sufrió ninguna herida de gravedad, lo que le permitió conversar brevemente para contarnos esos últimos momentos que pasó al lado de su jefe, a quien considerab­a un gran amigo.

Muñoz dijo que este jueves inició como un día normal de trabajo. Se levantó bien temprano y se fue a bretear a la pescadería “El Pingüino”, que le pertenece a don Robert y está en el puro centro de Ciudad Cortés.

Ambos se pusieron a cargar el camioncito pues a las 4:30 de la mañana tenían que irse directo a Pun- tarenas para entregar un pedido.

DonRobert tomó el volante del camión, mientras que Muñoz se sentó a su lado como siempre lo hacía. “Pasamos el cruce después del puente cuando de repente un carro nos invadió el carril y no se pudo hacer nada para evitar el choque”, recordó.

Momento de tristeza. El impacto fue tan fuerte que a don Luis Antonio se le apagaron las luces varias veces y por eso no recuerda mucho, sin embargo, hay unaimagen que sí quedará grabada en su memoria para siempre.

“Yo quedé prensado dentro del camión y por unos instantes perdí el conocimien­to, a la par mía estaba mi jefe Robert quien no se movía y estaba también prensado. A mí me sacaron y me llevaron al hospital, ahí me di cuenta que mi compañero había fallecido”, dijo.

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ALFONSO QUESADA El carro blanco invadió el carril del camión.
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CORTESÍA El camión quedó completame­nte despedazad­o.
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ALFONSO QUESADA El joven Pacheco era vecino de Naranjo, Alajuela.

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