¡TAMALEADA!
Hace cinco años doña Eligia Obando Loaiza, cariñosamente conocida como doña Eli, hizo tamales y sus cuatro hijos quedaron como locos por lo ricos que estaban, pero no volvió a hacer.
Los hijos le pidieron que por favor hiciera, pero ella les dijo que no tenía plata... hasta el pasado martes 11 de diciembre que se pegó 300 mil colones con nuestro código de la suerte.
“Ve, ahora sí habrá tamales, ya con ese premiezote que me regala
La Teja, tengo para complacer a mis cuatro hijos y cinco nietos.
Es algo que me alegra mucho porque cuando ellos me pidieron me puse triste, ya que no tenía el dinero suficiente. Todavía no termino de creer mi suerte”, nos comentó esta vecina de San Juan de Turrialba. En cuatro meses cumple sus sesenta años y está convencida que ya su celebración arrancó desde diciembre, porque el pasado domingo por lo menos pegó un pedacito del 15, claro, sin serie.
“Ya la suerte de mis sesenta años comienza a darse, primero con el pedacito del 15 y ahora con La Teja. Pero no se compara, con ustedes me pegué trescientos mil y con la Junta solo 35 mil. Ahora tengo que correr para comprar todo para los tamales”.
La tarjeta de regalo con ¢150 mil será toda para la tamaleada y los ¢150 de la orden de compra en Ópticas Visión también le cayeron del cielo porque hace tres años su hija Laura (los otros tres hijos son Omar, Daniel y Nancy) le compró unos, pero ya piden cambio.