Sacarán droga de celdas
El problema de adicción a las drogas en las cárceles es serio, afecta a 53 de cada 100 privados de libertad, lo que disminuye las posibilidades de que al salir de prisión se integren positivamente a la vida diaria.
Para aplacar este problema, el Ministerio de Justicia están trabajando en la creación de comunidades terapéuticas donde tratarán los problemas de adicción de los reclusos.
El proyecto es financiado con la plata que el Instituto Costarricense sobre Drogas (ICD) le quitó a bandas narcos.
La idea arrancó en enero y ya se están levantando edificaciones en la cárcel para menores en Sarapiquí, Heredia y en el CAI 26 de julio (Puntarenas).
Se espera que este mismo año se construya una comunidad en el CAI de Pococí y otra en la antigua sección de máxima seguridad de La Reforma.
La idea es que cada centro tenga capacidad para albergar a 40 reos, excepto La Reforma, el cual tendrá espacio para 132 privados de libertad.
Los presos seleccionados estarán en terapia por un lapso de seis meses, lo que se tiene previsto que dure el programa de desintoxicación.
La idea es que cada año se realicen dos programas para abarcar la mayor cantidad de reclusos posibles.
Platal. Guillermo Araya, director del ICD, informó que las dos primeras comunidades que ya están en construcción tienen un costo de ¢800 millones en infraestructura, así como ¢75 millones en equipamiento.
“Este es un proyecto de enorme importancia para el ICD y el Gobierno porque es llevarle tratamiento a privados de libertad en el mismo centro penitenciario, con un abordaje multidisciplinario para asegurar el éxito”, comentó Araya.