CON PAPELITOS BUSCA BRETE
Encontrar brete en el país cada vez está más rudo, basta con darse una vuelta por una feria de empleo para darse cuenta de lo difícil que está la situación y lo que se ve en la calle lo confirma.
El Instituto Nacional de Estadística y Censo en la última encuesta de empleo del 2019, reveló que hay cerca de 297 mil personas sin brete.
Uno de ellos es Miguel Murillo, de 44 años, quien pese a verla fea no se arruga y todos los días sale de su casa, en Pueblo Nuevo de Alajuela, a ganarse el arrocito y los frijoles.
La historia de este pulseador es digna de admirar, ya que desde hace dos años, de lunes a viernes, se va al centro de la Ciudad de los Mangos con hojas de cuaderno, las que parte en pedacitos y usa como tarjetas de presentación en las que ofrece sus servicios como pintor, pero también le entra a lo que sea, hasta de portero se la ha jugado por dos rojitos.
Cuenta que en enero del 2018 se le venció el nombramiento como misceláneo en el colegio Gregorio José Ramírez, en Montecillos de Alajuela, y desde esa fecha está sin brete fijo.
“Yo camino y reparto los papelitos a la gente, no me puedo dar el lujo de quedarme en la casa viendo el tiempo pasar porque estoy casado y tengo una hija de seis años. Siempre llego a las ocho de la mañana al centro y me voy a las cinco de la tarde cuando no me sale nada”, comentó.
Miguel recuerda que hace dos meses un desconocido le alegró el día gracias a un detallazo.
“Hace poco un muchacho me buscó en el parque de Alajuela, todavía no sé quién es y me regaló cuatrocientas tarjetas de presentación, antes de eso yo repartía papeles en los que escribía mi nombre y mi número de teléfono para que me contrataran en lo que fuera. Estas tarjetas que todavía tengo me han ayudado mucho”, detalló.
Aunque su especialidad es la pintada, le ha tocado hacer de
No es cualquiera el que viene con humildad a pedir trabajo, otros están de vagos en la casa”. Jesús Martínez Vecino de Alajuela
todo: cuidar carros, cortar zacate, trabajar como peón de construcción y hasta bajo los tres tubos en una mejenga.
“Un muchacho que conozco me dijo hace como dos años que si quería ganarme dos mil colones y le dije que sí. Resulta que él tenía un equipo para mejenguear, pero les faltaba un portero, entonces yo me cuadré y como no soy tan maje para atajar me la jugué, así me gané una platica y ese día el equipo no perdió”, dijo sacando caja.
Don Migue hace los bretecitos por temporadas, por lo que pasa por buenas y malas rachas.
Asegura que cuando reparte sus papelitos o las tarjetas no lo hace para incomodar sino para superarse.
“Hay gente que me dice que muchas gracias, que me van a tomar en cuenta si deben hacer un trabajito, pero hay otros que con mala cara le dicen a uno que no porque creen que uno les está pidiendo plata, pero no es así, yo lo que hago es buscar trabajo”.
Le sale brete.
Gracias a su iniciativa, don Miguel ha sacado buenos contratos, al menos dos por mes, pero eso no es suficiente para mantener a su familia.
“El más reciente fue hace como dos semanas, una señora me llamó para que le pintara un cuarto y ahí me gané alguito”, contó. Explica que, por dicha, en su casa nunca ha faltado la comida, pues su esposa tiene un trabajo fijo y con eso, más camaroncillos, que consigue salen adelante.
“Cuando tengo unas monedas voy a sacarle copias a mi currículo y lo voy a repartir a las empresas, es como todo, a veces lo reciben y otras veces no, pero por eso no me agüevo, la sigo pulseando”, insistió.
Es un ejemplo. A este alajuelense es común topárselo en el parque Central de Alajuela, ahí repartió varias tarjetas. Don Jesús Martínez le recibió una y al ver de lo que se trataba de inmediato felicitó a Miguel. “No es cualquiera el que viene con humildad a pedir trabajo, otros están de vagos en la casa, pero este hombre está aquí tratando de sacar a su familia adelante, la verdad es que verlo me alegró el día porque es un ejemplo”, comentó don Jesús.
Otros que también recibieron la tarjetita fueron don Franco Salas, Álvaro Galera y Eduardo Moreno, quienes con gusto dijeron que lo iban a recomendar. “Esta tarjeta se la voy a pasar a un hijo que quiere hacer unos trabajos en la casa. Dios lo va a recompensar porque Dios ama a la gente trabajadora y él se ve que es una buena persona”, mencionó don Franco.
Si usted quiere contratar los servicios o necesita de un porterazo, puede llamarlo al teléfono 8662-7528.