La Teja

Cinco personas contagian a 200

- Karen Fernández karen.fernandez@lateja.cr

El ministro de Salud, Daniel Salas, ha insistido hasta el cansancio en la importanci­a de que nos quedemos en casa para ganarle la guerra al COVID-19 y que no se propague tan rápido.

¿Por qué es tan importante el aislamient­o social para evitar que el virus corra como pólvora?

Ya nos lo han dicho las autoridade­s de Salud, pero muchos parecen que no quieren entender, por eso va de nuevo: el coronaviru­s se propaga mediante el contacto de persona a persona o con un objeto contaminad­o.

Si una persona que está enferma, pero no lo sabe porque no presenta síntomas, comparte con sus compañeros de trabajo, su familia y con otras personas que, aunque no sean cercanas se cruzaron en el camino, sin saberlo las está contagiand­o y estas a su vez transmitir­án el virus a más gente.

En poco tiempo, con solo cinco enfermos, se pueden contagiar a 200 habitantes.

Si esto pasa, se dispararán los casos y esto impedirá que en los hospitales puedan atender a todos de la mejor manera y hay más posibilida­des de que las personas con factores de riesgo, como adultos mayores y diabéticos, se agraven y mueran.

Pero si esa misma persona hace caso a las recomendac­iones del ministerio de Salud y se queda en casa como prevención, no anda en lugares públicos y no comparte con otros, no habrá posibilida­des de que contagie a tantas personas a la vez.

De este modo, la curva exponencia­l se mantiene baja y permite a los médicos y personal de salud concentrar­se en los casos más graves para tratar de evitar su muerte.

El periódico Washington Post hizo unas simulacion­es que permiten entender más claramente cómo es que se propaga el contagio del virus en distintos escenarios.

Tarea difícil. Leana Wen, antigua comisaria de salud de la ciudad de Baltimore, en Estados Unidos, explicó al The Washington Post lo difícil que es imponer cuarentena­s forzosas.

“Muchas personas trabajan en la ciudad y viven en los alrededore­s y viceversa. ¿Se separaría a la gente de sus familias? ¿Cómo cerraríamo­s todas las carreteras?, ¿Cómo mandaríamo­s entonces provisione­s a esas zonas?”, explicó Wen.

Por su parte Lawrence O. Gostin, profesor de Derecho de salud global en la Universida­d de Georgetown, en Washington, comentó que por fortuna hay otras formas de detener el brote, como las que se han aplicado en Costa Rica, pedirle a la gente que no salga a lugares públicos, que se queden en la casa y que guarden la distancia de 1,8 metros de distancia entre uno y otro.

“Quienes decidan no hacer caso tiene más posibilida­des de enfermarse y de expandir la enfermedad entre otros”, agregó Gostin al mencionado diario norteameri­cano.

En nuestro país ya tenemos la primera víctima, ¿qué más hará falta para que hagamos caso y nos quedemos en casa?

 ?? AFP ?? En otros países pusieron toque de queda para que nadie salga.
AFP En otros países pusieron toque de queda para que nadie salga.
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Costa Rica