NI PARECIDO AL HERMANILLO
El COVID-19 se paseó en los cumpleaños de mucha gente, pero que no se pueda armar una buena pelota para festejar no significa que no se pueda celebrar comiéndose un buen quequito en forma de... coronavirus.
Los propietarios de la pastelería Curling, un negocio familiar con más de 100 años de existencia, atendieron el pedido de Amanda, una tica que vive en Estados Unidos que quiso regalarle para el cumpleaños de su prima Arelis, que vive acá en Tiquicia, un queque con la “temática” del momento.
La Teja conversó con Leonardo Curling Méndez, miembro de la pastelería, para que nos contara la curiosa historia del queque con forma de coronavirus.
“Actualmente estoy a cargo de la pastelería y junto con mis hermanos y demás familiares tratamos de sacarla adelante, especialmente en estos momentos tan difíciles que estamos pasando”, explicó don Leo.
Justamente él fue el que decoró el queque COVID, como se le denominó, por aquello de que después de leer esta nota, usted también se antoje y encargue uno para darle un ñangazo a este virus que nos ha puesto a todos de cabeza, pero con la confianza de que este le
endulzará la cuarentena.
El contacto para el pedido del primer queque fue por medio de una sobrina de don Leo, que conocía a la cliente en Gringolandia.
“El queque ha sido muy gustado por muchas personas y espero poder hacer muchos más”, reconoció don Leonardo, quien es el que pone manos a la obra.
El queque COVID se parece mucho físicamente hablando al real, pero en cuestiones de actitud son como agua y aceite, pues este, el comestible, es dulce y simpático, no como el que el que ha arrasado con la vida de miles de personas en el mundo y seis de ellas en nuestro país.
No crea, según nos contó el pastelero, no es tan queque hacerlo, pues está decorado en pasta australiana y hay que cuidar mucho los detalles.
“Calculo que se dura entre ocho a diez horas en toda la preparación”, reconoció don Leo.
Así que si se le antoja uno, encárguelo con tiempo, para que le puedan poner el mismo amor y dedicación con los que este comerciante prepara cada una de sus crea
ciones.
Idea gustó. Si bien fue Amanda la que pidió que fuera en forma de coronavirus, don Leo le puso su sello creativo y buscó imágenes en Internet de cómo es este virus y añadió su toque personal, con algunos otros elementos en torno al tema, como una mascarilla, un alcohol en gel y un rollo de papel higiénico.
El primer pedido fue para el 14 de abril, para el cumpleaños de Arelis, luego postearon la foto del queque en el “feis” y como que la idea gustó mucho porque ya les hicieron otro pedido y mucha gente ha preguntado por la delicia, contó doña Edith, esposa de don Leo.
Otras características del queque es que le ponen carita triste, y son de vainilla y con relleno de dulce de leche.
La pastelería está en San Isidro de Coronado, del Mas x menos, 50 metros al norte, puede buscarlos en “feis” como Pastelería Curling o llamar al 2229-0650 o al 8518-8259.
Las entregas las hacen en La Sabana, Tibás, Desamparados y otros rincones sin costo adicional.
Para otras zonas de la Gran Área Metropolitana, el transporte sí habría que pagarlo.
El queque tiene un costo de 40 mil colones.
Visto bueno. Conversamos con Arelis, la cumpleañera que originó esta novedosa idea y nos contó que tanto a ella como a su familia les pareció muy divertida la iniciativa, algo así como al mal tiempo, buena cara.
“La idea estuvo muy original y graciosa, pese al tiempo que estamos viendo en estos momentos en el mundo, tampoco hay que tomarlo tan trágico”, explicó Andrea, quien es vecina de Heredia.
“Me pareció que tienen buenos precios y el queque estaba grande, porque nos costó terminarlo entre los tres. Además estaba muy rico”, agregó la cumpleañera.