Mariscos le dan respiro
La suspensión de eventos masivos y el cierre de locales ha hecho que muchos músicos nacionales la estén pulseando por todo lado para llevar el sustento a sus familias.
Tal es el caso del cantante Xavier Cartín, hijo del reconocido intérprete Javier Cartín, quien decidió montarse un negocito de venta de mariscos.
El integrante del dúo El Klam se montó hace una semana la empresita XCartin Seafood y le lleva pescado, camarones, pulpo y demás a sus clientes por medio del servicio exprés.
Xavier contó que al ver que ahora todos quieren que la comida les llegue hasta su casa para no tener que salir, decidió unirse a un pescador puntarenense para distribuir sus productos en el área metropolitana.
“Vamos a todos lados, Heredia, Santa Ana, San José y el envío es gratis. Tengo varios colegas como Phill Marchena y otros que están haciendo ceviche para vender y quise hacer el negocio redondo, ayudarnos entre todos, entonces, de una vez llamé a mi amigo de Puntarenas y ahí vamos poniéndole a las entregas”, mencionó.
Cartín contó que se creó una página en redes sociales con el nombre del negocito para los pedidos y que además se pueden hacer por medio de WhatsApp al 6310-7339.
Con ayuda de su esposa el músico se encarga de empacar cada pedido, bajo todas las medidas higiénicas, y se encargan de llevarlos a los clientes en moto.
En un principio una de sus ideas era vender los platillos ya hechos, ya que él sabe prepararlos muy bien, pero por ser un alimento que debe consumirse casi de inmediato mejor prefirió hacerlo de esta forma.
Apoyo. Su padre lo ha estado apoyando mucho con este negocito y ha aprovechado sus redes sociales y que conoce mucha gente para hacerle publicidad.
El exintegrante del grupo La Pandylla contó, por su parte, que como vive solo, poco a poco ha ido enfrentando la crisis económica y lo que hace es irse para una finquita que tiene en Guápiles para despejarse.
Padre e hijo se quedaron sin presentaciones casi que por lo que resta del año y añoran regresar a los escenarios para volver a cantarle a su público y tener un ingreso un poquito más seguro.