MÁS RICOS SIN PLANEAR
No hay escena que ponga a vibrar más a un espectador que la de un beso bien pegado y lleno de pasión.
Lo curioso es que siempre esos momentos románticos están muy bien detallados en los guiones de las películas, pero otras veces aparece un impulso inesperado y los actores toman el asunto en sus propias manos o mejor dicho, labios.
No importa cuánto se planee una película, a veces los momentos memorables son los que salen de la improvisación, ya sea como resultado de una impulsiva decisión de sus protagonistas o de una orden del director en un momento específico.
Algunos de los más memorables en la gran pantalla no estaban en los guiones originales de las películas. Por ejemplo, en “Los juegos del hambre: Sinsajo - Parte 2”, Elizabeth Banks y Woody Harrelson se besan, ya que el actor tenía sentimientos por su compañera, mientras que Mark Hamill improvisó besar la frente de Carrie Fisher en “Star Wars: El último Jedi” y se convirtió en un gesto muy significativo para el actor, ya que a los pocos meses su compañera falleció.
El sitio Infobae recolectó algunos de los besos más famosos del cine y los cuales nunca pasaron por la mente de los guionistas.
Se tenían ganas. A lo largo de “Jurassic World” del 2015, la tensión romántica aumenta entre Claire Dearing (Bryce Howard) y Owen Grady (Chris Pratt). Esa tensión culmina en un aprete después de que Claire salva a Owen de un dinosaurio volador, pero ese momento no estaba en el guion ni había sido solicitado por el director.
De acuerdo con la protagonista de la película, el beso no fue pensado. “No estaba escrito, fue espontáneo”, contó Howard a la revista Out. El director Colin Trevorrow habría expresado su deseo de un momento así entre sus protagonistas.
Es por eso que el último día de filmación, Trevorrow llevó a Pratt a un lado y sugirió que sorprendiera a Howard con un beso en pleno rodaje. “La idea era que Chris la sorprendiera frente a 200 personas ... y esa es la toma que está en la película”, dijo el realizador.
Último beso. Uno de los momentos más emotivos de “Star Wars: El último Jedi” lanzada en los cines en el 2017 ocurre cuando Luke Skywalker (Mark Hamill) se reúne con su hermana, Leia (Carrie Fisher).
Al final de la escena, Luke le da a Leia un beso en la frente, un momento que Hamill improvisó durante la filmación. Según Hamill, el beso fue un gesto genuino que le llegó en el momento.
“Fue espontáneo y realmente trascendental para mí, porque Luke se estaba despidiendo de su hermana para siempre”, dijo el actor a Entertainment Tonight.
Es un intercambio con peso extra considerando el fallecimiento de Fisher meses después de que terminó el rodaje (27 de diciembre de 2016, a los 60 años). El actor confesó que ya no puede ver esta escena desde entonces por la carga emotiva que representa.
La autopsia a Fisher reveló que había signos de “consumo de múltiples medicamentos” pero el motivo de la muerte no fue determinado.
Casi lo ahoga. En Spider-Man los fanáticos tuvieron la oportunidad de ver una escena que aún resiste el paso del tiempo: cuando Mary Jane (Kirsten Dunst) y Spider-Man (Tobey Maguire) se besan bajo la lluvia.
No fue una gran experiencia para él, pero a los espectadores les encantó. Aunque al parecer, el actor casi se ahoga filmando esa escena.
El propio director Sam Raimi reconoció que el Hombre Araña, que estaba boca abajo, casi se “ahoga” ya que el agua caía y se metía en sus fosas nasales. “Tuvo que fingir que el momento del beso fue agradable y dulce para él, cuando en realidad estaba casi ahogado”.
Pura miel. Al final de la última película “Los juegos del hambre: Sinsajo - Parte 2”, Effie Trinket (Elizabeth Banks) y Haymitch Abernathy ( Woody Harrelson) comparten un dulce beso.
El beso no se incluyó en el guion y en realidad fue en parte el resultado de los sentimientos genuinos de Harrelson hacia Banks.
El actor admitió después de que terminó la filmación que estaba enamorado de su compañera y que pudo haber usado su personaje como una excusa para besarla.
Admitió que Banks no tenía idea y que aprovechó la oportunidad para hacer realidad sus sueños de la vida real. “Personalmente siempre quise besarla. No sé si fue lo correcto”.
Afortunadamente, el beso también funcionó bien en la película y Banks no se molestó con su compañero ya que lo tomó como un halago.