Subido en la nave de la polémica
El presidente Carlos Alvarado viajó el fin de semana al hotel Punta Islita, en Guanacaste, donde pasó unos días con su familia.
Regresó este lunes a las 7:50 a.m. en el helicóptero TI-AZF, que ha estado presente en varias polémicas nacionales y esta vez no es la excepción.
La Fiscalía General de la República informó ayer que investigará el viaje para ver si hubo delito o no.
En el vuelo --que aterrizó en San Rafael de Alajuela-- viajaban siete personas.
La nave fue contratada por el ministro de Coordinación con el sector productivo, André Garnier, quien participó en el viaje. Los gastos se cubrieron a medias entre este ministro y el presidente, según informó Casa Presidencial.
El helicóptero es propiedad de la empresa Viajes Especiales Aéreos (VEASA).
Uno de los viajes polémicos que hizo fue el que reveló el piloto Roberto Arguedas en medio del escándalo por el cementazo chino. Arguedas dijo haber recibido órdenes del empresario Juan Carlos Bolaños para llevar en la aeronave a José María Figueres, Paola Mora, Otto Guevara, Rolando González y Johnny Leiva.
A Figueres lo trasladó dos veces para hacer recorridos de precampaña política en Tilarán. Los vuelos fueron pagados ocho meses después. A Guevara lo llevó en el 2016 a Guanacaste para visitar la mansión de Bolaños.
Al exdiputado del PUSC Johnny Leiva lo llevó a sobrevolar el volcán Tenorio como parte de un regalo de Bolaños a un empresario hotelero de Guanacaste y en el caso del verdiblanco González, el vuelo que intentó hacer era a Upala, pero no
se dio por falta de permiso de Aviación Civil.
También se vio envuelto en la polémica el ahora excandidato presidencial Fabricio Alvarado, quien a inicios del 2018 viajó a Puntarenas en esa nave, que seguía perteneciendo a VEASA, pero su dueño ya no era Bolaños, sino Francisco Jiménez, quien negó cualquier vínculo con el empresario cementero.