De cuatro en cuatro
llegué al banco estatal temprano, por dicha afuera solo había cuatro personas con su respectivo distanciamiento marcado. se acercó un encargado de seguridad y, sin saludar, me preguntó a qué tramite iba. “Voy para cajas”, respondí; “abra las manos”, dijo y me puso gel, me tomó la temperatura y dijo automáticamente “pase”.
Adentro había fila y conté bien para estar seguro: veinte personas más los que estaban siendo atendidos. Y revisé diez cubículos. “Perfecto, esto irá rápido”, pensé.
Pero solo cuatro estaban funcionando. “Mmm, ni modo, siempre es así, nunca he visto que funcionen todos a la vez”... y en ese momento me iluminó el espíritu de don Marcos, mi profe de Matemática en secundaria. si pasaban de cuatro en cuatro y eran atendidos cuatro personas a la vez, con un promedio de tres minutos por turno. serÍan CinCo tUrnos de tres MinUtos, o sea, después de quince minutos estaría fuera. Casi lo celebro como un gol porque saldría rápido y también por mi habilidad para los números.
Pero las cosas no fueron así, de las cuatro cajas mágicamente se cerraba una y por momentos quedaba solo una. al carajo mis cálculos.
Pasaron 16 minutos y quedaban catorce personas. entonces pensé en la gambeta. los cuatro clasificados serán Alajuelense, saprissa, Herediano y Cartaginés. otros cuatro por si fallaba alguno, san Carlos, muy cerquita y los otros podrían ser Pérez Zeledón, limón y Jicaral. Y los cuatro que podrían estar entre la clasificación y el descenso: grecia, sporting, guadalupe y santos.
Ya casi tenía el descendido, faltaban seis personas y opté por leer. estaba atrapado en la novela las montañas oscuras, de leslie gabriels, cuando levanté la mirada y solo había una persona. sentí emoción, terminó el turno de un señor y me encaminé con alegría, pero choqué con un rótulo: Cerrado teMPoralMente.