PORTALOSKY PARA EL NIÑITO
Ni el covid-19, ni la crisis provocada por la pandemia evitarán que el Niño Jesús tenga un nacimiento como se lo merece en la parroquia de San Jerónimo de Sardinal, en Carrillo, Guanacaste.
El arquitecto ruso Stanislav Tkachenko es el encargado de que esto suceda. Este artista tiene tres meses donando su trabajo en el embellecimiento de la parroquia guanacasteca.
Él junto a su papá, Vladimir Tkachenko, construyen una escultura en concreto y de tamaño real que representará el nacimiento de Jesús, pero irán más allá y recrearán su vida adulta.
El trabajo consta de cuatro etapas, pero la primera es la que esperan tener terminada para la Nochebuena y así este Niñito también nazca el 24 de diciembre.
Un detalle curioso es que Stas como llaman de cariño al escultor, no es cristiano; sin embargo, quiso tener un gesto de agradecimiento con la comunidad, al ver cómo se han unido para ayudar a los que menos tienen durante la pandemia que atravesamos desde el 6 de marzo.
“Me interesa mostrar a los que no entienden la iglesia en qué consiste el nacimiento de Jesús y como fue él en persona. Por eso colocaré una piedra con la explicación de mi trabajo una vez terminado”, contó el artista.
Agregó que lo están haciendo gratis porque están iniciando su negocio y no tienen muchos clientes, pero han visto como en estos tiempos de crisis la iglesia ayuda a quienes más lo necesitan y quisieron aportar.
El sacerdote Marcos Morales de la parroquia San Jerónimo de Sardinal, nos contó que fue gracias a doña Yamileth Hernández, colaboradora de la iglesia, que conoció a la familia rusa.
“Les dije que queríamos remodelar el frente de la iglesia y Stas me dijo que quería hacer algo de Jesús. Así llegamos a lo del nacimiento en la primera etapa.
“Además, este año se cumplieron 1.600 años de que san Jerónimo, nuestro patrono, tradujo la Biblia y le pedí incorporarlo en la obra, es así como se colocará una mano con el santo libro abierto a la entrada de la parroquia”, explicó el padre Marcos.
La especie de granero donde se montará el nacimiento es un área de 50 metros cuadrados al costado izquierdo del frente del templo. Ahí se hará la casita, las figuras de la Sagrada Familia, así como la mula, el buey y las ovejas que luego serán iluminadas.
Vida de Jesús. Otra de las etapas, se colocará donde ahorita están los árboles y en ella Jesús hecho adulto compartirá su palabra con dos muchachos y dos niños que lo escucharán atentamente. Además de colocar otros animales como iguanas y ovejas cerca suyo.
Al otro lado del portón de la entrada de la iglesia recibirá a los devotos una imagen de la Virgen de Los Ángeles y en las columnas de la cerca colocarán seis ángeles, explicó el artista europeo.
Stas admitió que es el trabajo más grande que ha realizado junto a su tata.
Los materiales han sido donados por otros miembros de la comunidad, mientras Stas y su familia han puesto el trabajo artesanal con mucho amor y dedicación.
Pero las ideas de todo lo que quiere hacer este talentoso ruso no dejan de fluir y hace poco en la parroquia desmontaron dos viejas campanas para las que diseñará un pozo para cada una, en los que en lugar de agua estarán estos elementos que forman parte de la historia de la iglesia.
Llegada a Costa Rica. Stas y su esposa, Verónika, llegaron al país en el 2017 junto a su hija Sofía. El primer mes estuvieron en Chepe, luego se mudaron a Atenas, donde vivieron un año, y ahí un amigo ruso los contrató para hacer unas cabinas en Playas del Coco, donde vivieron otro año.
“Al finalizar el trabajo debimos buscar casa, pero Playas del Coco es muy caro y nos vinimos para Sardinal a construir nuestra vivienda, pero se vino la pandemia y no pudimos terminarla y tuvimos que alquilar”, contó el joven ruso.
Sus padres Vladimir y Natalia, también se vinieron hace un año, luego de vender su casa en la tierra del vodka. Daniel, el más pequeño de la familia, nació en Tiquicia.
Ellos tienen la empresa ConcreTico muebles y adornos de concreto, y trabajaban muchó con el sector hotelero y turístico, uno de los más golpeados por la pandemia.