Dio la mano y la mató
Un hombre apellidado Abarca Duarte, de 27 años, fue condenado a 26 años de cárcel por acabar con la vida de la única mujer, Angélica Esperanza Fallas Romero, que le tendió la mano cuando más lo necesitaba y lo sacó de las calles. A inicios del 2018, Angélica lo ayudó a superar las drogas y luego se enamoró de él, por lo que se lo llevó a vivir con ella y su hijo.
La sentencia fue dictada por el Tribunal Penal de Pérez Zeledón, que halló a Abarca culpable del delito de femicidio en perjuicio de su expareja de 29 años.
El crimen ocurrió en octubre del 2018, en Villa Nueva de Pérez Zeledón, en el apartamento en donde Fallas vivía con su hijo, de 9 años.
El asesinato fue descubierto por el papá de Angélica el 26 de octubre, quien fue a buscarla y encontró el cuerpo tirado en el piso, envuelto en una sábana y con un mecate alrededor del cuello. Ya tenía varios días de haber sido asesinada.
“Se presume que Abarca asfixió a su expareja y luego huyó con el celular y con una consola de videojuegos que pertenecían a la ofendida”, dijeron las autoridades.
Abarca fue detenido el lunes 29 de octubre del 2018 en la plaza de las Garantías Sociales, en San José.