Avión también trajo esperanza
Rodolfo Alvarado, abogado de cuatro de las presuntas víctimas del exsacerdote Mauricio Víquez Lizano, dijo que la llegada del sospechoso a territorio nacional lo llena de esperanza a él y a sus representados de cara al proceso legal que está por empezar.
El expadre llegó al país pasado el mediodía de este jueves 6 de abril en un vuelo de Aeroméxico que aterrizó en el aeropuerto Juan Santamaría.
Víquez fue escoltado por agentes de la oficina de Interpol del OIJ y fue llevado a las celdas de la Policía Judicial en San José.
“Nos sentimos sumamente complacidos y sobre todo llenos de energía con la presencia en territorio costarricense del padre Víquez Lizano”, aseguró Alvarado.
El abogado dijo que luego de una espera de un año y nueve meses, tiempo en el que el exsacerdote estuvo preso en México, ahora tienen toda la esperanza de que la justicia costarricense cumpla pronto con su deber.
“Estamos muy esperanzados en que la justicia de alguna manera venga a resarcir prontamente los derechos pisoteados de personas a las que les han causado tanto daño en tanto tiempo”, dijo Alvarado.
Impacto muy fuerte. El abogado dijo que dos de sus representados, Anthony Venegas y Michael Rodríguez, se alegraron por la noticia de la extradición de Víquez, pero también los impactó mucho.
Tratamos de conversar con Anthony, pero dijo que el único que dará declaraciones es su abogado. El joven sí dio a conocer su sentir en Twitter.
“Se acabó la espera, el abusador que tanto daño nos hizo está en suelo tico, que se haga responsable por sus abusos y que altos mandos de la Iglesia reconozcan ante un tribunal su responsabilidad por el encubrimiento que le hicieron. ¡Vamos a lograr justicia!”, tuiteó Venegas.