Tope despide a Popo
En medio de caballistas, carros, bicicletas y hasta mariachis fue despedido este lunes don Porfirio Corrales, actor que le daba vida al personaje Popo, de la recordada serie de Teletica San Buenaventura.
El señor, quien era vecino de Sardinal de Puntarenas, falleció este domingo a sus 84 años, luego de haber padecido cáncer de próstata.
A Popo se le recuerda como el señor coqueto, enamoradizo y medio enojón de la serie que se transmitió en canal 7 a inicios de los años 90.
En su pueblo era todo un personaje, siempre montando a caballo, tirando retahílas y pícaro, no por nada tuvo 23 hijos.
Su hija Rocío Corrales nos contó que Popo era demasiado querido en el pueblo.
“Sus deseos fueron cumplidos, él quería un funeral con tope porque fue su pasión siempre y mariachi. Él fue superenamoradizo, por eso somos 23 hermanos. Fue muy fiestero, pícaro, terrible enamorado, pero muy buena persona”, comentó.
Rocío contó que su papá ingresó a San Buenaventura porque se hizo amigo del director José Cortés, pero que su papá no se dedicaba a la actuación.
“Era muy reconocido no solo en Sardinal sino a nivel nacional, no solo para la serie sino por los topes, siempre llegaba y se echaba alguito de tomar, se ponía a bailar y salía con alguna retahíla y rapidito tenía un montón de gente a la par”, dijo Rocío.
La actriz Marianela Hernández, quien hizo el papel de Loli en San Buenaventura, dijo que recordará a Popito como una gran persona.
“Era un gran caballero humilde, servicial, atento y muy pícaro. Enamorado de las mujeres y amante de los caballos, no faltaba a ningún tope. Como compañero en San Buenaventura era responsable con su texto, su vestuario impecable y enamorado de Loli .
“Gracias a Dios por los momentos vividos, lo voy a llevar siempre en mi corazón, mucha luz para Popito y que de Dios goce”, dijo la actriz.
Otro que sin duda lo tendrá por siempre en su memoria es Randall Arroyo, mejor conocido como Papaturro, quien cantó en la misa de Popo.
A él siempre lo andaba correteando en la serie y por eso, crearon muy buena química tanto en pantalla como fuera de ella.
“Con Popo nos unió una amistad que nació con la serie, ya que viajábamos juntos, compartíamos habitaciones en giras, era como un papá para mí, imagínate yo con 13, 14 años y él me cuidaba en cada viaje”, dijo Arroyo.
Era muy alegre, extrovertido. Pero siempre me daba buenos consejos, nos reíamos de lo que hacíamos, ensayábamos en la habitación, yo le ayudaba mucho también con sus guiones, le daba apoyo moral en algunas cosas que le parecían incómodas como vestirse de mujer. Éramos el dúo dinámico de San Buenaventura, si me tocara escoger a otro socio, lo volvería a escoger a él”, agregó Papaturro.